Un alegato por la causa armenia

Las actrices españolas Paz Vega y Ángela Molina coprotagonizan la última reivindicación política de los hermanos Paolo y Vittorio Taviani, El destino de Nunik, basada en hechos reales sucedidos durante el genocidio armenio a manos de las tropas turcas en 1915. El filme, que se estrena el próximo viernes, se inspira en la novela autobiográfica La casa de las alondras, de Antonia Arslan, superviviente de una familia armenia masacrada en el conflicto. Paz Vega, que ayer presentó junto a Ángela Molina la película en Madrid, encarna a Nunik, la joven heroína cuyo sacrificio permitió que parte de aquella familia sobreviviera.

"Cuando leí el guión me enamoré de la historia, para mí era un privilegio trabajar con los Taviani sobre un tema que desconocía, porque el genocidio armenio no se estudia en el colegio", afirma Vega. Por su parte, Ángela Molina encarna a Ismene, la criada griega que protege a Nunik. "Los Taviani son poetas del cine y esta película una de las cartas de amor más bellas que han aportado a la humanidad", asegura la actriz. "Era necesario refrescar la memoria histórica. Cuando rodábamos, había muchos actores armenios que lloraban porque su familia también había muerto así".