El euro
El ministro Solbes atribuye a la generosidad de los españoles en las propinas la causa de la subida de los precios. Si bien es cierto que los comerciantes pueden animarse a subir sus precios, al comprobar lo "sobrados" que nos mostramos con las propinas, la realidad es que la causa se encuentra más en la engañosa disposición anímica de beneplácito que, tanto en el vendedor como en el comprador, origina la cuenta en decimales. En base a ello, gran parte de culpa ha de atribuírsela, en primer lugar, al Gobierno que no supo hacerlo y, en segundo lugar, al Gobierno que no adopta medidas para corregir el error de que los españoles no contemos -como deberíamos- en centéuros, conscientes de que, incluso de este modo, a la cantidad así definida tendríamos que sumarle la mitad de ella, para que se acercara a la cantidad que estaríamos pagando en pesetas.