Visibilidad

Todos los recursos son pocos para recuperar el terreno perdido. Ahí está la aparición del ex ministro Francisco Álvarez Cascos para recordarnos a todos que tenemos AVE a Málaga gracias al PP. No consta que esta singular campaña de los populares incluya a otro ex, Juan Carlos Aparicio, hoy feliz alcalde de Burgos y que en sus tiempos de ministro de Trabajo llegó a llamar a los andaluces indolentes. En todo caso, estos refuerzos no tienen que hacer mucha gracia a Javier Arenas. Su foto junto al duro de Álvarez Cascos echa por tierra todos los esfuerzos que viene realizando por ofrecer una imagen más amable y de centro.

Por si fuera poco, a Aznar no se le ocurre otra cosa que venir a Andalucía para cenar con el líder libio Gaddafi, con lo que anula cualquier tipo de críticas que pudiera lanzar contra los socialistas por recibir a este dictador. Los encuentros privados con el mandatario libio dan para mucho. A la espera de que se conozca de qué hablaron debajo de la jaima instalada en el hotel alcalaíno, otros en su día se desplazaron desde Sevilla hasta el mismo Trípoli para lograr la financiación necesaria para poner en marcha su personalísimo proyecto político. Eso sí, nunca se supo el grado de compromiso adquirido con el régimen libio a cambio de la ayuda reclamada.

En definitiva, a Arenas la excesiva visibilidad que ofrecen algunos de sus correligionarios no le favorecen nada, sino todo lo contrario, le perjudican en una tierra en la que, precisamente, se tienen muy presentes aún las ofensas, desprecios y ataques que recibió por parte de estos mismos que ahora vienen a decirnos lo bien que lo hicieron ellos, un cuento difícil de tragar a estas alturas.

Pero lo verdaderamente visible será, esta semana, el debate final en el Parlamento andaluz sobre los próximos presupuestos de la Junta, Se someten a aprobación sin aceptar enmienda alguna de la oposición, aunque todavía queda margen para incorporar alguna de ellas. Con estas cuentas de José Antonio Griñán se da término a una legislatura caracterizada por el crecimiento económico continuo de nuestra comunidad y que ha contado con broche final de la firma de un Pacto por la Vivienda, que está sirviendo ya de referencia en otros lugares.

Para su consecución se tuvieron que emplear a fondo muchos, entre otros el propio Griñán, hombre poco dado a los protagonismos estelares y que se ha convertido en una pieza clave en el Gobierno de Chaves, tanto que ya se prepara para asumir el reto de un nuevo mandato.