Obras urgentes para afrontar el riesgo de sequía

El Gobierno gallego decidió ayer aprobar una partida de cuatro millones de euros para financiar actuaciones urgentes diseñadas para hacer frente al riesgo de sequía.

La Xunta tomó esta decisión después de examinar un informe elaborado por la Consellería de Medio Ambiente en torno a la situación de los embalses, tanto de abastecimiento como de producción hidroeléctrica, de estudiar las cifras de precipitación de los últimos meses y, sobre todo, a la vista de las previsiones de los técnicos de Meteogalicia, cuyos cálculos consideran que la probabilidad de lluvias en los próximos meses seguirá siendo baja.Los embalses están al 32% (casi la mitad de la media de los últimos años) y el otoño que está a punto de terminar se va a saldar con uno de los registros más bajos de los últimos 30 años.

Las medidas urgentes incluyen actuaciones destinadas al ahorro de agua, al desarrollo de una campaña de sensibilización social e información dirigido a los ciudadanos y actuaciones de infraestructura hidráulica de abastecimiento en núcleos de población que estén especialmente amenazados por el riesgo de sequía.

La Xunta también ha aprobado medidas a medio y largo plazo. Las primeras, por valor de 17,22 millones, incluyen obras de infraestructuras A Coruña, Vigo-Morrazo, Piñeiros y Broullón.

Una de las más significativas es la construcción, con un coste de 8 millones, de un depósito de cabecera en el embalse de Cecebre, del que depende el abastecimiento de A Coruña y en estos momentos el más afectado por la ausencia de precipitaciones. El embalse de Baiona tiene agua para tres meses, el de Caldas para dos, el de Ferrol para cuatro, el de Vilagarcía para tres y los de Vigo para cuatro, siempre en el supuesto de que no se produzcan precipitaciones durante ese tiempo.

El Gobierno ha aprobado también la realización de obras en núcleos de más de mil habitantes que no disponen de embalses hasta completar, junto a las demás medidas, inversiones por valor de 32 millones de euros.

La Niña

El informe de situación estudiado ayer por el Consello especula con la posibilidad de que la situación se deba al fenómeno del Pacífico ecuatorial conocido como La Niña, que desplaza las altas presiones del Atlántico hacia el norte de la península ibérica y bloquea la entrada de frentes y perturbaciones. Meteogalicia subraya, sin embargo, que la infleuncia de La Niña puede cambiar.

De momento, la situación de los embalses permite satisfacer las demandas de abastecimiento "como mínimo en los próximos dos meses", según los datos que maneja Augas de Galicia.

En los núcleos de población más pequeños, (menos de 1.000 habitantes) la Xunta tiene previsto actuar en función de los problemas que se vayan presentando, realizando obras de emergencia en cada caso, e incluso ha previsto la posibilidad de movilizar cisternas de abstecimiento si fuesen necesarias.