La temporada de esquí empieza parcialmente en seis estaciones

Las estaciones de esquí de Baqueira-Beret y Boí Taüll, en el Pirineo occidental, y las de Port del Compte, La Molina, La Masella y Vall de Núria, en el oriental, abren parcialmente sus pistas este fin de semana en una nueva temporada blanca que confía en arrancar de manera masiva a partir del puente de la Constitución, el 6 de diciembre.

Los gestores del negocio de la nieve prevén un año mejor que el 2006-2007, considerado el peor de las dos últimas décadas, en el que se vendieron medio millón de abonos menos que en 2005-2006, lo cual se tradujo en un descenso del 40% en el número de esquiadores.

Para paliar la escasa nieve que hay en las montañas, algunos centros ofrecen abonos reducidos de hasta el 50% durante el fin de semana, y otras instalaciones prolongan estos decuentos hasta el próximo 5 de diciembre. El abono oficial y diario del curso oscila entre 42 euros (Baqueira-Beret) y 25,5 (Vall de Núria).

"No se puede perder ni un día de esquí. Hay que resarcirse de la temporada anterior", coinciden en asegurar los responsables de las estaciones de esquí. Por el momento, las expectativas son más optimistas que en 2006-2007. Pese a registrarse sólo una nevada, la que cayó durante la primera semana de noviembre, el descenso de las temperaturas en la alta montaña ha permitido poner en marcha los cañones para producir nieve de manera artificial.

Sin paisaje invernal

Las condiciones para esquiar, sin embargo, no son las de un paisaje blanco invernal. "Hace falta que nieve", afirma Roberto Buil, director de comunicación de Baqueira-Beret. "Esperamos la nieve natural", dice Toti Rosselló, director de mercadotecnia y de comunicación de La Molina. Vistas las condiciones, seis estaciones de esquí catalanas abrirán parcialmente sus pistas. "Será un ensayo general con vistas al puente de la Constitución", puntualiza Joaquim Alsina, director de la Asociación Catalana de Estaciones de Esquí y de Montaña (ACEM).

Las cifras son gráficas. Baqueira-Beret tiene previsto poner en funcionamiento 13 kilómetros de sus pistas de los 104 que tiene, repartidas en la zona de debutantes de Baqueira y en Beret. Bonaigua permanecerá cerrado. La Molina, que ya abrió el pasado fin de semana, ofrece a los usuarios siete pistas abiertas de las 45 que tiene (4 kilómetros de 53). En La Masella funcionan 9 pistas de un total de 56, con sólo 6 kilómetros para esquiar. El centro más optimista es Boí Taüll, con 11 kilómetros de pistas en funcionamiento de un total de 44. Xavier Reynés, director del centro leridano, explica que la nieve es natural en las pistas abiertas situadas en las cotas altas. "La estación estará operativa en su totalidad", asegura. Esquiar en Vall de Núria será gratuito durante el fin de semana.

Pese a la apertura parcial de las pistas y la falta de nevadas, el sector del negocio de la nieve se muestra optimista. "Las empresas están más tranquilas que los usuarios y los hoteleros", asevera Alsina.

Grandvalira, el dominio de esquí más grande del Pirineo con cerca de 200 kilómetros de pistas, y Vallnord -las dos en Andorra- abren con el 25% de sus instalaciones a pleno rendimiento y una reducción en el precio de sus abonos hasta el 5 de diciembre. Las pistas de esquí nórdico, que el pasado año se quedaron sin abrir por la falta de nieve, están aún pendientes de las precipitaciones.

Se desconoce cuándo abrirán oficialmente las pistas de Port Ainé y Espot (Pallars Sobirà), cuya propiedad pertenece al Instituto Catalán de Finanzas, organismo dependiente de la Generalitat. La gestión de ambos centros ha sido traspasada recientemente y mediante concurso público a la empresa Gran Pallars, que agrupa a empresarios y hoteleros de la comarca.