Las mariposas

En la esquina de la plaza de un viejo pueblo andaluz, tan viejo como remota suena su ubicación, Los Montes Orientales, un pequeño cartel tipo folio A-4 lleva una flor impresa y el lema "No a la violencia contra las mujeres. Día 25 de noviembre".

La mente bucea en la memoria y cruza el océano. Era el año 1981, el Primer encuentro feminista de Latinoamérica, celebrado en Bogotá, declaró ese día como Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer. La Asamblea General de la ONU lo hizo oficial el 17 de diciembre de 1999 y en Resolución 54/134 invita a todos los gobiernos y organizaciones a que realicen actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública en esa jornada.

La fecha se eligió en recuerdo de las tres hermanas Mirabal, mujeres de la sociedad rural acomodada de la República Dominicana, que murieron acuchilladas y estranguladas por orden del dictador Trujillo un día 25 de noviembre de 1960, cuando volvían con el chófer por una escarpada carretera tras visitar a sus maridos en prisión. Minerva se había atrevido a rechazar las maniobras de seducción del gobernante y se mantuvo en sus ideas políticas. A partir de entonces, dice la historia, la inquina y el despecho se dirigió contra ella y su familia en forma de encierros, torturas y finalmente la muerte.

Aquel día 25 de noviembre arrancaron la vida a Las Mariposas, nombre por el que era conocida Minerva en la clandestinidad, y también comenzó el final de una larga y negra dictadura. Desde entonces hasta ahora, la violencia que sufren las mujeres ha sido una preocupación de los organismos supranacionales y de asociaciones vinculadas con la protección de los derechos humanos. Existen motivos para ello, subsisten los crímenes de honor, las mutilaciones genitales, las muertes selectivas de las niñas, las violaciones y muertes de mujeres a manos de sus maridos o compañeros.

Es un problema extendido en todos los países del mundo y su dimensión depende del nivel de los derechos de las mujeres, no sólo de su reconocimiento en las leyes, sino también de la posibilidad de exigir su cumplimiento. Son muchas las variables y cada Estado ha de señalar sus prioridades en cada momento.

España abordó la violencia contra la mujer en el ámbito de la pareja de una manera integral en el año 2004 y, desde entonces, existen juzgados específicos y profesionales que reciben formación especializada. Andalucía, con una reciente ley, pretende ayudar en la recuperación de ese derecho de ciudadanía con medidas preventivas, asistenciales y de ayudas para romper la dependencia y vinculación con el agresor. Los datos oficiales concluyen que ha existido un descenso de las mujeres mayores de edad que han declarado ser víctimas de malos tratos durante el último año, un 3,6% frente al 4% de hace cuatro años, según el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Es un ligero descenso y no se puede bajar la guardia ya que se están manifestando nuevas formas... tienen nombre de mujer inmigrante.

Dice Amelia Valcárcel que "el feminismo ha sido y es esa suma de acciones contracorriente, rebeldías y afirmaciones, que tantas mujeres han hecho y hacen sin tener para nada la conciencia de ser feministas" . Es cierto, aquellas hermanas no eran conscientes del efecto multiplicador de sus acciones; pero la rebeldía trascendió de un remoto lugar de una lejana isla hasta los rincones de los pueblos de Andalucía, recordándonos un año más que la educación en igualdad es la mejor protección contra estas violencias.

Inmaculada Montalbán Huertas es magistrada del TSJA.