El caos de Cercanías frena el túnel del AVE y el traspaso del aeropuerto

El caos de Cercanías de Barcelona tendrá consecuencias sobre otros dos grandes proyectos del Gobierno en Cataluña: el túnel del AVE por el centro de la ciudad y el cambio de gestión del aeropuerto de El Prat. Ni una cosa ni la otra se llevarán a cabo hasta que la red ferroviaria vuelva a la normalidad. Y esto no se prevé para antes de febrero. El secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, admitió ayer que la única prioridad es Cercanías y que "los otros asuntos pasan a segundo plano".

El compromiso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para encarrilar la descentralización de El Prat este otoño se tambalea. El portavoz del Partit dels Socialistes, Miquel Iceta, reconoció ayer que no habrá tiempo para ello en esta legislatura. "El compromiso político del Gobierno central en este sentido es firme, y esperamos que el aeropuerto se pueda transferir antes de que hayan pasado cuatro años desde la aprobación del Estatuto". El nuevo plazo expiraría, pues, en 2010. "Si antes de las elecciones se avanza en este sentido, pues mejor", remachó el portavoz socialista.

Lo del túnel del AVE es más problemático porque a la voluntad del Ministerio de Fomento de aplazar la adjudicación (debería haberse hecho en octubre y carece de fecha) se enfrenta la voluntad contraria del Gobierno catalán y del Ayuntamiento de Barcelona. Ayer, Morlán insistió en que no piensa dar fechas de nada y en que Cercanías se lleva todos los esfuerzos, de modo que el ministerio no está en disposición de asumir otros frentes. A su lado, Hereu reconocía que había reclamado a Fomento que adjudicara de inmediato las obras del túnel. El principal obstáculo para esa adjudicación, que puede dilatarse hasta después de las elecciones, es el "clima político", según se dijo en la reunión del consorcio Barcelona Sagrera Alta Velocidad, celebrada ayer.

La sesión del consorcio sirvió para aprobar la licitación de las obras ferroviarias, viarias y parte de la urbanización de la zona que va desde Sagrera hasta el nudo de la Trinitat por un importe global de 375 millones de euros. Licitará Adif.

Estas obras tienen una consecuencia: anulan cualquier posibilidad de paso del AVE por Barcelona que no sea con un túnel entre Sants y Sagrera.