El PP no logra ningún apoyo para censurar la exposición de fotografías del Guggenheim

El Partido Popular (PP) se quedó ayer solo en el Parlamento vasco en su intento de exigir la retirada de unas fotografías expuestas en el Museo Guggenheim Bilbao por considerar que atentan contra las víctimas de ETA y relativizan el terrorismo. La proposición no de ley del PP fue rechazada con los votos del tripartito, el PSE y Aralar. EHAK no participó en el debate. La enmienda socialista que rechazaba censurar la exposición, pero pedía al Guggenheim una reflexión sobre el contenido de la muestra tampoco fue aprobada.

Las fotografías que el PP quería retirar integran la serie Crónicas del País Vasco, de Clemente Bernad, una parte de la exposición Chacun à son goût (es decir, "Cada uno a su gusto"), abierta al público en el Guggenheim hasta el próximo mes de febrero. Las imágenes de Bernad, el único fotoperiodista entre los 12 artistas seleccionados para la colectiva, recogen escenas de manifestaciones a favor de los presos de ETA, funerales de guardias civiles víctimas de atentados o la condecoración de un comisario francés en el cuartel de Intxaurrondo.

La propuesta del parlamentario popular Santiago Abascal fue duramente criticada por los portavoces de los restantes grupos, que no vieron en las fotografías ofensas a las víctimas. José Antonio Rubalkaba, del PNV, acusó a Abascal de interpretar las imágenes con una "imaginación retorcida" e incidió en que los términos empleados en sus pies de foto -como "militantes de ETA" o "muertos por ETA", que el PP considera "una interpretación sesgada"- son utilizados frecuentemente en los medios de comunicación.

Ointzane Lasa, de EA, también se fijo en los ataques lanzados por el PP contra los pies de foto. Lasa reprochó a Abascal que sostuviese su propuesta sobre mentiras, ya que entre los argumentos que el parlamentario popular manejó para justificar la retirada de las imágenes citó que se aludia a un "muerto en circunstancias no aclaradas", para referirse a un activista de ETA que se suicidó, frase que no figura en los títulos que acompañan a las fotos de Bernad en la pinacoteca.

El socialista Antonio Rivera consideró inaceptable censurar la exposición. "No podemos como Parlamento proponer su suspensión, la censura, y sí, a cambio, demandar a las entidades afectadas por este asunto una reflexión sobre lo acertado o no de la muestra", recalcó.