El PSC sostiene que el tripartito está unido aunque vote separado

El PSC ha decidido dar rango de normalidad al hecho de que los principales miembros del Gobierno catalán voten divididos en el Parlament.

Es lo que sucederá el viernes cuando los consejeros Josep Lluís Carod y Joan Puigcercós (ERC) y Joan Saura (ICV-EUiA) voten afirmativamente una petición de cese de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez por el caos ferroviario presentada conjuntamente por sus grupos parlamentarios. Pero contra la moción votarán el presidente José Montilla y los consejeros de Economía, Antoni Castells, y de Política Territorial, Joaquim Nadal, los tres del PSC.

Montilla intentó evitar esta división del tripartito proponiendo a sus dos socios que el Gobierno catalán no participe en esa votación. Su tesis es que un gobierno no debe pedir ceses o dimisiones a otro gobierno. Este criterio fue inicialmente aceptado por Carod y Puigcercós. Y por Saura. Pero como ha sucedido también en otras ocasiones notables, los dos dirigentes de ERC no pudieron resistir las presiones internas de su partido y terminaron por desatender la demanda de cohesión formulada por Montilla. Esto ha llevado a que Saura también vote a favor del cese de la ministra.

El secretario de organización del PSC, José Zaragoza, asumió ayer que, tal como están las cosas, los socialistas se quedarán solos en el Parlament y no podrán impedir que prospere la petición de un cese que también reclaman CiU, el PP y el Grupo Mixto. Sin embargo, Zaragoza sostuvo que esa votación no quiebra la solidaridad gubernamental "porque no afecta a una política del Gobierno catalán", sino que expresa una toma de posición política respecto a un asunto que es responsabilidad de otro Gobierno, el del PSOE que preside José Luis Rodríguez Zapatero.

Zaragoza justificó, además, que Carod, Puigcercós y Saura voten "en coherencia" con la moción de sus grupos parlamentarios. "Nadie entendería que hayan presentado la petición y luego no la votaran", dijo. No obstante, destacó también que queda claro que "no es el Gobierno catalán el que pide el cese, sino el Parlament".

No será la única ocasión en que la crisis originada por las obras del AVE divida al tripartito. ERC anunció días atrás que apoyará una manifestación de protesta organizada por plataformas independentistas para el 1 de diciembre. Iniciativa Verds está tratando de que esa manifestación tenga un carácter unitario para sumarse a ella. Pero sus socios de Esquerra Unida i Alternativa ya anunciaron ayer que acudirán a ella.