200 personas cortan la calle para sacar el DNI

Y la indignación ciudadana estalló. La renovación del DNI y del pasaporte se convirtió otra vez ayer en una odisea para centenares de madrileños. Hartos de esperar, unas 200 personas cortaron por la tarde la circulación de la calle de Santa Engracia (Chamberí), al lado de la oficina de la policía. "Es inhumano. No podemos estar esperando ocho horas para que luego nos llamen y nos digan que se han quedado sin números. No podemos venir todos los días, tenemos que trabajar", protestaba Teresa Fernández.

El caso de Teresa es similar al de miles de madrileños. Tiene una hija de 14 años, que desde junio intenta hacerse el carné. "He ido a todas las comisarías de Madrid y no he podido hacerlo. O llegaba tarde o había mucha gente. Y cada vez le piden más el DNI a mi hija", decía.

El marido de Teresa y su hija aprovecharon el puente. Madrugaron y fueron a la comisaría de su distrito, en Fuencarral-El Pardo, pero cuando llegaron no había números para todos los que estaban en la cola. Por eso, se marcharon a la comisaría de Pío XII, en Chamartín. Mismo problema, mismo resultado. Ante la imposibilidad de que les pudieran hacer el DNI, utilizaron otra opción: marcharse a la oficina de la calle de Santa Engracia. Al igual que centenares de madrileños que aprovecharon el puente de Todos los Santos para hacer este trámite burocrático.

"Cerraron la oficina a las dos de la tarde y no nos habían dado número. Cuando abrieron a las cuatro, entregaron 30 ó 40 números. El resto que estábamos esperando nos quedamos sin hacernos el carné", explicó Teresa.

Ante esa situación y hartos de esperar, decidieron cortar la calle de Santa Engracia. La interrupción del tráfico duró unos 15 minutos, hasta que llegaron seis coches patrulla del Cuerpo Nacional de Policía y tres furgones de la unidad de intervención policial, más conocidos por antidisturbios.

La gente protestó por la situación que estaban viviendo, pero la policía logró convencerles de que dejaran pasar a los coches. Muchos afectados acudieron a la policía y pidieron hojas de reclamaciones. "Es una situación insufrible. Muchas personas han venido con sus hijos. Hasta una mujer ha tenido que estar en la cola dando de mamar a su hijo, de tan sólo seis meses, y cambiarle los pañales en plena calle", protestó María Jesús Santos, otra afectada. Esta mujer, publicista de profesión, tiene que renovarse el pasaporte para poder ir a Estados Unidos sin necesidad de sacar un visado en la embajada.

El nuevo DNI electrónico requiere un trámite más lento que el anterior, de alrededor de 20 minutos por persona.

Pero el de Santa Engracia no fue el único motín de la tarde. Un centenar de personas también protestaron en la oficina que hay en el número 28 de la calle de Almagro (Chamberí), cuando, hartos de esperar, les dijeron que no podrían renovarse el DNI. "Es una vergüenza, porque he querido aprovechar un día que no trabajo para hacer esta gestión. Al final he perdido todo el día", se quejaba Susana Arregui, una afectada.