La Fiscalía estudia la paliza grabada a un menor en Boiro

La Fiscalía de Menores estudia las medidas a adoptar ante la brutal paliza de un escolar a otro en el muelle de Escarabote (Boiro) la semana pasada y que fue grabada en un telefóno móvil por un amigo del agresor. Así lo confirmó el alcalde de Boiro, el nacionalista, Xosé Deira, quien condenó "no sólo el acto agresivo en sí" sino la complicidad de un grupo de escolares que jaleaban al autor de los malos tratos. El alcalde boirense abogó por implicar a los centros educativos, las familias y los servicios sociales de los ayuntamientos para poner coto a este tipo de actuaciones.

La paliza se produjó el pasado 22 de octubre y llegó a estar colgada en un portal de vídeos de Internet, además de circular por los teléfonos móviles de varios jóvenes de Boiro, uno de los cuales lo puso en manos de la Guardia Civil.

La secuencia de un minuto y 37 segundos recoge una sucesión de puñetazos, empujones y patadas, varios de ellos en la cara y en los costados, de uno de los menores a un chaval visiblemente más débil que apenas acierta a defenderse de los golpes. La paliza es coreada por un grupo de chavales, entre ellos el portador del teléfono móvil, que animan al agresor a seguir pegándole al escolar en el suelo. En dos ocasiones el atacante le increpa: "No vas a volver a tocar a mi hermano", a lo que el chaval desde el suelo replica con la boca ensangrentada: "No, no lo volveré a tocar". Mientras el resto de chavales, que en ningún momento aparece en imagen, ríen y aplauden cada golpe sin hacer ademán de defender al menor tendido en el suelo. El autor de la grabación proclama entre vítores que "el vídeo vale su peso en oro" y llama la atención de los "lamentos" del agredido con un primer plano en el que se pueden apreciar varios dientes rotos.

Cambio de domicilio

Fuentes de la investigación que instruye el Juzgado de Ribeira han confirmado que varios de los menores implicados en este episodio de violencia juvenil ya han sido identificados. Además, según avanzó ayer la agencia Europa Press, el joven agredido no ha vuelto al colegio Jaime Balmes de Noia donde estudia desde el pasado 22 de octubre, día en que tuvo lugar la paliza. Las mismas informaciones apuntan a que el chaval ha cambiado de residencia y se ha mudado a vivir con una de sus tías ante el temor a ser atacado de nuevo.