El PP retira del cementerio de Paterna flores con los colores republicanos

La decisión del Ayuntamiento de Paterna, en manos del PP, de cambiar el ajardinamiento junto al monumento del cementerio dedicado a las víctimas de los fusilamientos de la Guerra Civil y del franquismo, desató ayer una tormenta política. Las plantas que florecían en rojo, amarillo y morado, los colores de la bandera republicana, han sido sustituidas por otras blancas y amarillas.

"Es un atropello, un atentado contra la libertad y la democracia", denunció el ex alcalde y portavoz socialista, Francisco Borruey. El Ayuntamiento ajardinó el entorno con los colores republicanos hace años y en Todos los Santos, el 1 de noviembre, "se celebraba un pequeño homenaje" a los fusilados en la tapia del cementerio, más de 2.200 durante la guerra y los primeros años de la dictadura. La concejal Carmen Ferrer acusó al PP de "crispar" a la sociedad, y el coordinador de la memoria histórica de Societat i Progrès, Matías Alonso, criticó que el PP ha optado precisamente por los colores del Vaticano. Los socialistas protestaron en el pleno celebrado anoche.

El PP adujo que pretendía renovar el ajardinamiento "con colores neutros" y "sin referencia política" de cara al día 1, y que participará en el acto a los fusilados.