La ley que obliga a retirar símbolos franquistas incluye los de las iglesias

El texto que salió ayer de la ponencia parlamentaria encargada de tramitar la Ley de Memoria Histórica, con el acuerdo de siete partidos políticos que suman mayoría absoluta en el Congreso, incluye en su artículo 15 la obligatoriedad por parte de las administraciones de retirar de calles y edificios los símbolos franquistas que aún quedan. La norma afecta también a nombres de calles de personajes relevantes del régimen militar de Franco. En el caso de los propietarios privados de edificios, entre los que se incluye a la Iglesia, se prevé la posibilidad de retirar subvenciones públicas si mantienen los vestigios del franquismo.

El texto consensuado establece que "las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura [...]".

También dedica un apartado a los propietarios privados de edificios que mantengan símbolos franquistas: "Las administraciones públicas podrán retirar subvenciones o ayudas a los propietarios privados que no actúen del modo previsto en el apartado 1 del artículo 15".

Éste es el punto que incluye a la Iglesia, propietaria privada de cientos de edificios, que mantiene en muchos de ellos la placa "caídos por Dios y por España" con la lista de los falangistas locales muertos en la Guerra Civil, en ocasiones acompañada de un yugo y unas flechas, el emblema de la Falange. La ley no resuelve el futuro de la iglesia del Valle de los Caídos, donde está enterrado Franco. Está previsto que los legisladores aprueben el texto en un pleno convocado para el próximo 30 de octubre.