El presidente de la Xunta replica a Fenosa que no podrá repercutir en las tarifas el canon hidroeléctrico

El jefe del Ejecutivo, Emilio Pérez Touriño, advirtió ayer al vicepresidente y consejero delegado de Unión Fenosa, Honorato López Isla, que su empresa no podrá repercutir en las tarifas la tasa hidroeléctrica que proyecta el Gobierno gallego. "En ningún caso" el impuesto podrá ser trasladado a los particulares, replicó Touriño, aferrándose al convenio firmado con la Secretaría General de Energía, dependiente del Ministerio de Industria. El presidente explicó que se trata de un impuesto medioambiental que no va a lastrar "la competitividad" de las eléctricas. Touriño defendió el canon "como una medida sensata, no como un gravamen revolucionario".

Su réplica fue la primer respuesta que recibió López Isla, que el jueves arremetió contra la tasa por considerarla recaudatoria. La segunda llegó de boca del conselleiro de Industria, Fernando Blanco, quien avanzó que su departamento exigirá a las hidroeléctricas que inviertan en Galicia para garantizar la calidad del suministro que, en su opinión "no está garantizada". Preguntado por las declaraciones de López Isla, el conselleiro nacionalista replicó que las eléctricas deben acometer un esfuerzo importante en ese sentido. También quiso matizar que el impuesto hidroeléctrico aún no está regulado, con lo que consideró "prematuro posicionarse".

Pese a todo, Blanco reiteró que la Consellería de Industria ha asumido que una parte de los beneficios que las empresas de la energía están detrayendo de Galicia "tiene que traer como consecuencia que el conjunto de los ciudadanos gallegos también tengan beneficios".

"Lo que no puede ser es soportar los aerogeneradores, los embalses y las térmicas y que los impuestos se paguen en Madrid y los beneficios se queden allí". "Tenemos derecho", añadió Blanco "a que los gallegos percibamos los beneficios que, entre otras cosas, estamos exportando en un 40% al resto del Estado". Al igual que Touriño, Blanco no cree que el canon deba ser repercutido sobre el precio a pagar en el recibo e instó al Ministerio de Industria a afrontar el precio de este servicio "de una forma clara para que todos sepamos cuál es su coste", aunque admitió que el importe final de la energia sufrirá moficiaciones en el futuro.