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Hallado el cadáver de un bebé en un contenedor de basuras de Girona

Los Mossos investigan los historiales médicos en el Alt Empordà

Un trabajador del vertedero municipal de Pedret i Marzà (Alt Empordà) encontró el viernes el cadáver de un bebé recién nacido en la máquina compactadora de basura. El operario estaba controlando una cinta transportadora cuando vio el cuerpo aplastado entre dos grandes paquetes de residuos. El recién nacido todavía tenía el cordón umbilical y se desconoce si estaba vivo o muerto cuando fue arrojado a un contenedor de basuras, posiblemente en Figueres, Roses o La Jonquera.

Los Mossos d'Esquadra investigan en los centros hospitalarios y médicos de la zona para averiguar si en los últimos días han atendido a alguna mujer con signos de que acababa de dar a luz. El vertedero de Pedret i Marzà da servicio a toda la comarca del Alt Empordà. A las seis de la mañana comienza a compactar los residuos en grandes paquetes que pasan por una cinta transportadora. Según las primeras investigaciones, el cadáver del bebé entró en la máquina compactadora, que tiene una fuerza de presión de 240 toneladas, pero no llegó a ser empaquetado.

Desfigurado

El operario que manipulaba la máquina se dio cuenta hacia las diez de la mañana del viernes de la presencia de un objeto extraño en la cinta transportadora, que acabó cayendo al suelo. Cuando se acercó a retirarlo, se percató de que era un niño, aunque estaba muy desfigurado, y que aún conservaba el cordón umbilical.

Según el conductor de uno de los camiones del vertedero, el operario sufrió una crisis nerviosa. "Se llevó las manos a la cabeza y no paraba de gritar, hubo muchos nervios y todos nos quedamos de piedra", relató. Atónitos ante el hallazgo, avisaron a la policía, que revisó las instalaciones y deshizo algunos paquetes de basuras por si había más pistas. Las primeras hipótesis apuntan a que alguien había arrojado al pequeño unas horas antes en un contenedor de la comarca.

La policía considera que lo más probable es que el recién nacido fuera lanzado a un basurero de Figueres, aunque no descartan que se deshicieran de él en otras poblaciones como Roses o La Jonquera. La investigación se centra ahora en los hospitales del Alt Empordà por si alguna mujer fue atendida de alguna lesión relacionada con un parto y para revisar los historiales clínicos para hallar a una embarazada a la que tocara dar a luz y no acudiese al hospital a hacerlo.

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