Estado de alerta en el Caribe por la llegada del huracán Félix

Un potente huracán -casi tanto como el Dean, que en agosto causó una treintena de muertes en México, Jamaica y República Dominicana- vuelve a amenazar el Caribe. El ciclón Félix se convirtió anoche en un huracán de categoría cuatro con vientos de hasta 225 kilómetros por hora, mientras seguía su camino hacia Centroamérica en aguas abiertas del Caribe. Según el pronóstico, provocará intensas lluvias en Venezuela y Colombia.

Al entrar en contacto con las cálidas aguas del Caribe, el Felix siguió fortaleciéndose aún más, y puede llegar a la máxima categoría de cinco. Sería el segundo del año, después del Dean, en alcanzar la máxima categoría en la escala Saffir-Simpson, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.

La advertencia de tormenta tropical seguía ayer para Jamaica y se ha anulado para las Antillas Holandesas al pasar ya el Félix por las islas de Aruba, Bonaire y Curação. La isla de Granada ha sido la más afectada al producirse fuertes lluvias. Los pronósticos apuntan a que el huracán provocará también intensas lluvias en el norte de Venezuela y en la península colombiana de La Guajira. El Félix sigue una trayectoria oeste-noroeste en dirección al norte de Nicaragua y Honduras y llegará a Belice a partir de mañana.

Mientras tanto, las autoridades mexicanas pronosticaron ayer que la tormenta tropical Henriette se iba a convertir en huracán con categoría uno y pidieron a la población de los Estados del Pacífico extremar las precauciones. Las intensas lluvias del Henriette dejaron seis muertos en el Estado de Guerrero, cinco de ellos menores de edad, debido a derrumbes y caídas de vallas en el puerto de Acapulco.