Disputa por las lindes de Marbella

El trámite de aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Marbella (PGOU) ha animado a las poblaciones vecinas a reclamar, una vez más, la devolución de terrenos que hasta ahora han entrado en el término marbellí. Reivindicaciones como la hecha el pasado viernes por el alcalde de Ojén, el independiente Antonio Gómez, se han convertido casi en una tradición ligada al rendimiento que se le pueda sacar a cada pedazo de tierra.

Las exigencias de Ojén, cuyos límites se sitúan al norte de Marbella, incluyen la zona de La Mina, un suelo contemplado por la Junta de Andalucía para uso industrial, y otra parcela, conocida como La Mairena, en la que hay urbanizaciones y que está experimentando un gran desarrollo urbanístico. El alcalde cifra en unas 100 hectáreas el terreno escatimado a su municipio. Tras una reunión con Gómez, la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (PP), reconoció que el futuro planeamiento es "muy ambicioso en cuanto a las lindes", algo que el concejal socialista Javier de Luis matiza. "El PGOU no establece las lindes, lo único que hace es clasificar los usos del suelo", explica De Luis, que fue asesor de urbanismo del Ayuntamiento marbellí. "Un cambio en el término no puede hacerse sin la intervención de un organismo superior, como es la Junta, y aún así, debe haber informes favorables del Instituto Geográfico Nacional y estar muy consensuado", expone.

Los dos regidores califican de "históricas" las disputas por esta franja de terreno y no es la primera vez que los representantes de ambos municipios se han hecho una fotografía para demostrar sus buenas intenciones para resolver el conflicto. Desde 2003, la Junta ejerce como mediadora aunque no se ha llegado a una solución satisfactoria.

El Plan de Ordenación del Territorio de la Costa del Sol (POT), elaborado por la Junta de Andalucía, califica los suelos de La Mina como "de oportunidad" para ampliar el saturado suelo empresarial de Marbella. Además, se contempla la creación de un punto limpio que brindaría a Ojén la oportunidad de gestionar sus propios residuos. El complejo medioambiental contará con una subvención de la Unión Europea de un millón de euros y los actuales regidores negocian la posiblidad de cogestionarlo.

Benahavís e Istán, también limítrofes con Marbella, mantienen conflictos similares sobre las lindes, aunque de menor envergadura. Benahavís reivindica una parcela denominada Vega del Colorado, que sería urbanizable si perteneciera a su término, mientras que Marbella la considera parque suburbano. Por su parte, Istán reclama la zona de Los Manchones, catalogada como no urbanizable.