Puntualizaciones sobre 'Grecia arde'

He leído con especial detenimiento su editorial Grecia arde, en la edición del 27 de agosto, y permítame hacer las siguientes observaciones en relación a sus comentarios sobre que en Grecia "los sistemas de alerta civil y lucha contra el fuego son insuficientes" y que "el número de muertos es demasiado elevado y viene derivado de una falta de capacidad, no sólo en la lucha contra el fuego, sino también en los procedimientos de alarma y evacuación":

- Grecia cuenta con la mayor flota de aviones y helicópteros contra incendios de la UE (20).

- Los incendios que se han declarado en Grecia los últimos tres días son numerosos (más de 170) y se reparten por todo el país. A destacar que la noche del sábado 25 de agosto se declararon, sólo durante el intervalo entre las 21.00 de ese día y la 1.00 del día 26, 50 incendios distintos en diversas zonas del Peloponeso, mientras que el domingo 26 se declararon otros 70 incendios, a la vez que fueron localizados numerosos mecanismos incendiarios, lo que viene a probar que se trata de incendios provocados. A destacar que las zonas elegidas por los incendiarios se localizan en áreas de vegetación frondosa, castigadas duramente por el verano más caluroso y seco que ha vivido Grecia en los últimos años.

- Durante estos días han soplado en toda Grecia vientos que han llegado a alcanzar los 90 kilómetros por hora, lo que ha traído como consecuencia, no sólo que los incendios se propagaran con increíble velocidad, sino la imposibilidad de que despegaran los aviones contra incendios en muchas regiones.

- Las condiciones especialmente extremas y el hecho de que los incendios se hayan propagado con increíble velocidad, han conducido a la inhabilitación en poco tiempo de la red vial que comunica con los pueblos de montaña y a que no haya sido posible el paso por los mismos de las fuerzas terrestres de extinción de incendios para llegar a tiempo y ayudar a los habitantes que se han visto rodeados por el fuego.

- En estos pueblos, lo único que se ha podido hacer ha sido enviar, bajo condiciones extremas y en medio de nubes de humo que impedían la visión, helicópteros Super Puma del Ejército griego con el fin de salvar a los habitantes que habían quedado atrapados por las llamas.

- El 90% de los casos de las víctimas que han muerto quemadas por el fuego se trata de personas que se habían negado a seguir las indicaciones de la policía de abandonar sus pueblos, mientras era tiempo. Asumiendo la responsabilidad personal de permanecer en sus casas en su esfuerzo por salvarlas de las llamas.

Se trata, sin lugar a dudas, de una situación sin precedentes, y el cuerpo griego de bomberos, a pesar de las dificultades más arriba señaladas, ha luchado y sigue luchando con gran sacrificio personal y celo.

No obstante, con tan gran número de incendios en todo el territorio griego y con las condiciones climatológicas más arriba indicadas, es imposible hacerles frente con rapidez y eficacia. En verdad, nadie con sentido común puede plantear, bajo estas circunstancias, una cuestión de insuficiencia o de descoordinación.