La crisis obliga a Home Depot a rebajar un 18% el precio de una filial
Los problemas de liquidez derivados de la crisis hipotecaria han comenzado a afectar a las grandes operaciones de compra lanzadas por las firmas de capital riesgo. Home Depot, la mayor cadena de artículos de bricolaje y reforma del hogar en EE UU, se ha visto obligada a reducir en 1.800 millones de dólares (1.300 millones de euros) el precio de su negocio de venta al por mayor, que se ha quedado en 8.500 millones.
Sin esta rebaja del 18% en el precio pactado en junio pasado era imposible que Home Depot pudiera desprenderse de su filial, que quedará finalmente en manos de Bain Capital, Carlyle Group y Clayton, Dubilier & Rice. Los problemas que los tres fondos de capital riesgo (private equity) han tenido para financiar la compra acabaron forzando la rebaja. Wall Street está siguiendo muy de cerca la operación debido a la gran cantidad de deuda implicada. Los inversores y los bancos buscan en ella señales de cómo las restricciones al crédito derivadas de la crisis pueden afectar a las grandes fusiones y adquisiciones pendientes en EE UU, que suman unos 400.000 millones de dólares (300.000 millones de euros).
Los mercados recibieron ayer dos malas noticias sobre la evolución del mercado inmobiliario estadounidense. Las ventas de viviendas usadas cayeron en julio por quinto mes consecutivo, aunque sólo lo hicieron en un 0,2% con respecto al mismo mes de 2006. Y el precio medio de la vivienda bajó un 0,6%, con lo que lleva 12 meses seguidos de descenso, récord histórico.
Los analistas esperan los datos de agosto y septiembre para calibrar el verdadero alcance de la crisis inmobiliaria.
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