Toda la oposición reprocha a Zapatero que respalde a Álvarez
Los principales grupos de la oposición en el Congreso (PP, CiU, ERC e IU) reprocharon ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, su "obstinación" en avalar la actuación de su ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en la crisis del servicio de Cercanías de Barcelona. Convergència i Unió (CiU) y Esquerra Republicana (ERC) amagaron incluso con solicitar la comparecencia de Zapatero en el Congreso si insiste en "ignorar a la mayoría de la Cámara", que ha exigido la destitución de Álvarez.
El secretario del grupo del PP en el Congreso, Jorge Fernández Díaz, encontró sorprendente que Zapatero respaldara a su ministra "cuando a quien tendría que apoyar es a los miles de ciudadanos catalanes que desde hace más de tres años padecen las consecuencias de la manifiesta incapacidad de gestión de Magdalena Álvarez". La secretaria de Política Social, Ana Pastor, dijo que la actitud del presidente supone "el mundo al revés".
También el coordinador de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, lamentó la decisión del presidente del Gobierno que calificó de "defensa cerrada"y "equivocación" porque, agregó, las incidencias en el servicio de Cercanías no son sólo achacables "a la modernización del servicio". "La ministra no lo ha hecho bien", abundó. Su compañero de grupo, el diputado de Iniciativa per Catalunya, Joan Herrera, advirtió a Zapatero y, por extensión al PSOE, de que esta actitud les "pasará factura" en Cataluña en las próximas elecciones generales. "El presidente no ha entendido los problemas reales de Cataluña, porque el problema no es ir media hora más rápido a Madrid, sino de movilidad en toda Cataluña por el colapso de Cercanías", declaró.
Falta de confianza
Más contudentes se pronunciaron desde CiU y ERC, al avisar de que no descartan solicitar la comparencia de Zapatero a partir de septiembre. "Si no hace caso al conjunto de peticiones de los grupos catalanes [de relevar a la ministra] es evidente que deberá rendir cuentas ante el Congreso en el próximo periodo de sesiones, a partir de los mecanismos de control al Gobierno que pueden ejercer los grupos", manifestó el portavoz adjunto, el convergente Jordi Jané.
"Se continúa invirtiendo poco y se gestiona mal. Y lo que es más grave, hay un cansancio de la ciudadanía y una falta de confianza en los servicios públicos", remachó Jané.
Desde Esquerra Republicana, su portavoz Jordi Tardà, lamentó el gesto de Zapatero porque, en su opinión, la destitución de la ministra "habría permitido al Gobierno recuperar la credibilidad perdida en Cataluña. Todo lo demás, es ir mareando la perdiz". Tardà recordó que su grupo y el de Iniciativa han pedido la comparecencia del vicepresidente económico, Pedro Solbes, para que aclare las inversiones que contemplará el presupuesto de 2008 para Cataluña. Si no les convencen las explicaciones, pedirán que las dé Zapatero.
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