La policía suiza busca desde hace una semana a Ylenia, una niña de cinco años
El supuesto secuestrador, que se ha suicidado, vivía en Benimantell (Alicante)
Los medios de comunicación locales ya la han bautizado como la Madeleine suiza. Se llama Ylenia, y es una niña de cinco años, también rubia, guapa y con los ojos claros como la inglesa que desapareció en el Algarve portugués hace más de tres meses. La mayor diferencia es que en el caso de Ylenia todos esperan lo peor. Ya se ha identificado al supuesto secuestrador y posible asesino, un hombre de 67 años, Urs Hans von Aesch, un suizo que vivía en las afueras de Benimantell (Alicante) desde 1990. Von Aesch se ha suicidado, y en su furgoneta se han encontrado objetos de la niña.
Todo empezó el martes de la pasada semana cuando Ylenia, de cinco años y natural del cantón de Appenzell, en la Suiza de habla alemana, desapareció sin dejar rastro tras volver en patinete a una piscina para buscar algunos efectos personales olvidados. La última persona en verla con vida fue el cuidador de la piscina.
Desde el principio, las sospechas recayeron en un hombre de 67 años, Urs Hans von Aesch, ciudadano suizo residente en Benimantell (Alicante) desde 1990. Según los informes, el sospechoso vivía allí en una modesta granja en compañía de su esposa. Ésta dejó la localidad el sábado, tras saber que su marido se había suicidado, informan Santiago Navarro y Rosa Biot.
Durante todo el día de ayer, más de 80 personas buscaban a Ylenia en las cercanías del bosque en el que apareció la furgoneta blanca Renault, con matrícula española, de Von Aesch. El perímetro analizado con lupa es de cerca de 30 kilómetros.
El sospechoso se suicidó el martes pasado tras disparar a bocajarro a un paseante de 46 años, ya fuera de peligro, que se habría acercado peligrosamente a su furgoneta. En ese vehículo, la policía científica suiza confirmó en la tarde de ayer haber encontrado la ropa de Ylenia dentro de su mochila, junto con su casco y patinete, impregnados de restos del ADN de Von Aesch.
"Hay un nexo preocupante entre la desaparición de Ylenia y Madeleine", comentó a este diario Sonia Arnal, responsable de temas sociales del semanario de Lausana L'Hebdo. "Según diversos informes consultados, Von Aesch habría estado en Portugal en la misma época de la desaparición de Madeleine, lo que lleva a las autoridades a conclusiones preocupantes", explicó Arnal.
Por su parte, el periódico Blick asegura que Von Aetsch habría sido ya condenado en 1961. Según el diario de Zürich, cuando tenía 20 años Von Aetsch fue arrestado por intento de secuestro al hijo de un industrial, a quien habría exigido 10.000 francos de la época. Advertida por el padre, la policía suiza habría detenido al supuesto extorsionador.
La especialista Arnal considera que, "visto que toda la ropa de la niña está en su bolso, ella debe de estar obviamente desnuda en alguna parte, o se la ha vestido de diferente manera para sacarla de Suiza", opinión compartida por responsables de diversos centros de ayuda a la infancia, quienes creen que la pequeña podría estar ya en el extranjero. Según la policía de Saint Gall, "el sospechoso habría premeditado su acto".
Las autoridades helvéticas colaboran estrechamente con la Policía Nacional española y han dado parte a Interpol de la desaparición. Mientras tanto, Charlotte, la madre de la pequeña Ylenia, está bajo observación permanente de un equipo de psicólogos y protegida por su entorno familiar a la espera de la confirmación de las peores previsiones de la policía suiza. Según un comunicado oficial hecho público anoche, las autoridades "se esperan lo peor".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.