Feijóo reclama a Madrid 2.500 millones en 2008 y una comisión mixta de seguimiento de las infraestructuras

El presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, desempolvó ayer la calculadora para pedir al Gobierno central que plasme sobre el borrador de los presupuestos su compromiso con Galicia. El líder popular demostró con dos ejemplos que su vara de medir es Cataluña.

Primero aludió a la inversión del Ejecutivo central en el Fórum Internacional de las Culturas para reclamar un gasto similar del Estado en el Monte Gaiás. Luego pasó por alto la creciente indignación desatada en Cataluña contra la falta de inversión del Gobierno central y exigió al presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, el mismo trato que recibe aquella comunidad. "Tenemos el mismo derecho que Cataluña a crear una comisión mixta de seguimiento entre el Parlamento gallego y el Gobierno central para vigilar la ejecución de las infraestructuras", dijo con tono solemne. Según las cuentas de Feijóo, el Ministerio de Fomento debería adjudicar a Galicia una partida de 2.500 millones de euros en los presupuestos de 2008 para garantizar los plazos de la llegada del tren de alta velocidad y de las autovías interiores.

"Cataluña sabe el día, año y mes en que llegará el AVE y en Galicia no sabemos siquiera cuándo comenzarán las obras", argumentó, pasando por alto que fue el Gobierno de José María Aznar el que agilizó los trabajos de la Alta Velocidad para el tramo Madrid-Lleida.

En su posterior reflexión, el presidente del PP dejó escapar una crítica involuntaria al Ministerio de Fomento de Francisco Álvarez-Cascos. "Si entre 2000 y 2007 [el Gobierno socialista tomó posesión a mediados de 2004] se hicieron 250 kilómetros, ¿cuánto tardaremos en terminar los 400 kilómetros que faltan?", se preguntó. El líder del PP gallego reclamó a PSdeG y Bloque que se sumen a las reivindicaciones de los populares porque, a su juicio, "septiembre va a ser clave para que Galicia pueda conectarse con la meseta en AVE en 2012".

Feijóo se mostró preocupado por el conformismo que, en su opinión, han demostrado los nacionalistas en su negociación con el Gobierno. Acusó al BNG de "aceptar tan sólo un incremento de la inversión del 4%, similar a la del IPC" y concluyó que ese avance en el capítulo de infraestructuras, "no servirá para desbloquear las obras que Galicia necesita. "No es de recibo decir que con ese aumento se cubren las necesidades", sentenció.