Barberá recurre a hostales para alojar a los inmigrantes
Grupos de 'sin papeles' deambulan por el río mientras la mayoría está en albergues
El Ayuntamiento de Valencia dio ayer por finalizado el desalojo del centenar de inmigrantes que dormían bajo el puente de Ademuz. Ayer, 41 de ellos -previo un nuevo desalojo policial- fueron enviados a albergues por los servicios sociales, un grupo que se suma a los 39 atendidos lunes y martes. No todos acabaron en estos centros: la falta de plazas hizo que cuatro fueran a hostales y dos no llegaron a ser atendidos, según las ONG.
"Que yo sepa, ninguno ha acabado en ningún hostal, pero tampoco pasaría nada, se les ofrece a todos ellos atención personalizada", comentó la concejal de Bienestar Social, Marta Torrado, a este diario. "Todas las decisiones obedecen a criterios técnicos", indicó.
Aparentemente, no hay rastro de los inmigrantes que dormían en el río. Una excavadora trabaja en el lugar que ocupaban los sin techo y furgones policiales vigilan la zona. Sin embargo, basta dar un paseo por los alrededores para descubrir grupos de inmigrantes, alguno con la maleta a cuestas, sin rumbo fijo. En uno de ellos, a última hora de la tarde de ayer, estaba Wilson, senegalés de 20 años. Él tenía pensado dormir en casa de un "hermano" (amigo), pero otros de sus compañeros no tenían ni idea de lo que harían.
El día había comenzado movido. Agentes de la Policía Local acudieron de nuevo al antiguo cauce del río Turia a primeras horas de la mañana, como reconocieron fuentes policiales, para evacuar al medio centenar de inmigrantes que aún quedaban en la zona y deshacerse de sus enseres. "Nos despertaron a patadas", comentaba ayer Wilson. Al lugar se desplazó el concejal de seguridad ciudadana Miguel Domínguez y personal de servicios sociales que insistieron en el ofrecimiento de plazas en albergues. Al final de la mañana, según fuentes municipales, 41 personas habían pasado por las dependencias municipales del centro de atención al inmigrante. Sumados a los 37 atendidos desde principios de semana, la cifra asciende a 78, del centenar de personas que ocupaba los bajos del puente de Ademuz.
De los 41 que acudieron ayer, 22 fueron acompañados por la Red de Acogida, integrado por entidades que colaboran con los inmigrantes. De ellos, cuatro fueron remitidos a dos hostales de la ciudad de Valencia por falta de plazas (entre ellos, el Bisbal), como comentaron los funcionarios municipales a los representantes de las asociaciones. Además, otros dos -un marroquí y un senegalés- no llegaron a ser atendidos al acabar el horario de atención, como señala Luis Poveda, de la Red de Acogida y por carecer de sitio para ellos. "Es mentira que haya suficientes plazas en albergues como señaló la concejal", apuntó Poveda. El martes, Torrado indicó que había 54 estancias libres.
Poveda insistió en que las plazas que ofrece el Ayuntamiento no son indefinidas, lo que, sumado a que no son suficientes, le sirvió para recordar la necesidad de tener un centro de acogida específico para inmigrantes, especialmente de cara al otoño, cuando comience la temporada agrícola.
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