La alcaldesa de Marbella da el visto bueno al plan urbanístico y comienza a tramitarlo

El nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella (Málaga) comenzará a tramitarse sin cambios sobre el proyecto elaborado por la Junta de Andalucía. La alcaldesa de Marbella (PP), Ángeles Muñoz, anunció ayer que ha dado el visto bueno al documento y confía en hacer la aprobación inicial a finales de julio. La regidora dejó la puerta abierta a cambiar el texto en el periodo de alegaciones y aseguró que sus criterios "habrían sido otros". Por lo pronto, piensa luchar para que no se derriben las 350 viviendas ocupadas que no se acogen al plan.

El nuevo equipo de Gobierno de Marbella ha tardado tan sólo una semana en estudiar el texto, entregado junto con las competencias urbanísticas, retiradas tras el caso Malaya. La urgencia responde, según Muñoz, a que la ciudad necesita salir de la situación de "bloqueo económico", además de "acabar con el vacío legal en temas urbanísticos, restaurar la seguridad jurídica y devolver la confianza al sector".

La alcaldesa convocó ayer una comisión urgente para informar a la oposición -PSOE tiene 10 ediles e IU un concejal- de sus planes. El partido socialista aplaudió que hayan decidido sacar adelante delPGOU con la mayor agilidad posible. "La decisión ha sido fruto del buen trabajo que ha hecho la Junta de Andalucía, que ha presentado un documento muy positivo para Marbella", aseguró su portavoz, Paulino Plata.

Pero la aprobación hecha por el equipo de Gobierno de Muñoz es genérica, por lo que todavía pueden introducirse cambios sustanciales. La alcaldesa ha sido siempre muy crítica con los redactores del documento, a los que ha acusado de elaborarlo "de espaldas a la ciudad". De hecho, avanzó parte de sus intenciones al pedir "lealtad institucional" al Ejecutivo autonómico cuando se abra el periodo de alegaciones. "El plan tiene que dar respuesta a las necesidades reales de la ciudad incluyendo todas las modificaciones oportunas", declaró.

Antes de llevarlo a pleno, el documento debe recibir informes favorables del secretario, el interventor y el jefe de Urbanismo.Técnicos consultados mantienen que el calendario que se ha marcado el equipo de gobierno popular es "bastante optimista" y que estos informes son "extremadamente complejos". A partir de ahí, se abrirá el periodo de alegaciones, de unos dos meses.

La aprobación provisional del PGOU podría producirse en otoño y la ratificación a principios de 2008, dentro de los plazos marcados por la Junta.

Para seguir el proceso, el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía han pactado la creación de una comisión bilateral de seguimiento. Los socialistas también han propuesto que se cree una mesa de participación ciudadana y un consejo sectorial.

El reinicio de la actividad urbanística no sólo puede animar a los constructores a invertir en la ciudad, sino que también proporcionará al Ayuntamiento una fuente de financiación para conseguir mayor liquidez. El PGOU establece un sistema de compensaciones para regularizar las 18.000 viviendas ilegales detectadas en la ciudad, que beneficiará la calidad de vida de los vecinos de Marbella, privados de zonas verdes y equipamientos. Los promotores no siempre aportarán solares para compensar el daño hecho -el PGOU contempla contribuciones de 1.879.904 metros cuadrados-, sino que también resarcirán a sus habitantes con otro tipo de servicios como el pago del asfaltado de carreteras, nuevos viales, o colectores.