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Entrevista:ALBERTO SAN JUAN | Actor

"Mi moral no es muy consistente"

PERFIL. Con 38 años, es un chico ultratímido y con mucho encanto por ello, que desilusionará a quien espere de él constantes gracietas. Tiene un punto frágil y un punto trascendente, y dice que le gusta el mar, cocinar, estar tumbado sin hacer nada, ver a su familia e ir a Cañizares, el pueblo de su abuela

Pregunta. Estrena Bajo las estrellas, de Félix Viscarret. ¿Es usted tan suda como Benito Lacunza, el protagonista?

Respuesta. No tengo nada que ver. Bueno, si en algo me parezco es en que me da miedo la implicación afectiva, y, por otra parte, no veo otra forma de vivir que a través del afecto.

P. Y tampoco tiene algo de trompetista, como él.

R. Nada. Salvo haberme cogido alguna que otra trompa en mi vida. Pero me encantaría.

P. Mejor actor en el Festival de Málaga. ¿Lo suyo es para tanto?

R. Bueno, soy el actor premiado, que no es necesariamente el mejor.

P. Como vástago de Máximo, ¿va de hijo de papá y de niño del artista?

R. En la medida de lo posible, sí, porque como nuestros ramos artísticos son distintos, no hay problema. Y a mí me gusta mi padre.

P. ¿Saben en casa que es actor o creen que toca el piano en un puticlub?

R. La verdad es que la primera vez que actué en un bar les invité, y vinieron. Se rieron mucho. No sé si de mí.

P. ¿Dejó el periodismo porque era un manta?

R. Era bastante manta: me faltaban reflejos y olfato, que se suponen condiciones imprescindibles; pero tenía a favor una curiosidad total por el ser humano y sus historias.

P. ¿Y lo de manta entre los actores se disimula más?

R. A veces. Oiga, a mí si me pincha mucho por ahí... Mi moral no es muy consistente, ni en el sentido ético ni en el del ánimo.

P. Mejor no darle caña.

R. Déme caña si quiere, pero yo entro fácilmente en el papel de la víctima.

P. ¿Hizo Animalario, sobre la boda de Ana Aznar, por envidia, ya que no le invitaron?

R. La verdad es que me hubiera gustado estar en esa boda, para ver cómo el ser humano va construyendo mundos artificiales por miedo a vivir.

P. ¿Cuál es para usted El otro lado de la cama?

R. Más que el lado, lo importante son las circunstancias. Yo creo que lo ideal es dormir abrazado.

P. Dijo que con su Marat-Sade el público se excitaba. ¿Qué hacía para aliviarle?

R. No, yo sólo lo excitaba. Y proponía un alivio colectivo. Pero no se llegó a desencadenar la orgía que era uno de los objetivos de cierta escena.

P. Habla de la labor destructiva de los políticos. ¿No se pasa un poco?

R. Yo creo que no, sinceramente. Los políticos son representantes de un sistema que está bastante alejado de lo humano.

P. Tampoco le gusta Benedicto.

R. No me gusta nada. La Iglesia es la institución más retrógrada. Y el Papa me parece una de las figuras sociales que mayor daño provoca.

P. ¿Y para cuándo un Animalario con tiara?

R. No tenemos intención de cumplir un temario. Pero me gustaría que se me hubiera ocurrido a mí el título La mala educación para hablar de la Iglesia.

P. En su Días de cine, el protagonista dice que la transición nos liberó antes la entrepierna que la conciencia política. ¿Usted cuál de las dos tiene más liberada?

R. Espero llegar algún día a ser libre del todo en algo.

P. ¿Es duro ser gracioso?

R. Tener la obligación de serlo es muy duro, y esto es algo que los actores padecemos mucho en las promociones.

P. ¿Qué le recomienda su director espiritual?

R. No tengo. Sí tengo amigos que para mí son maestros de vida.

P. ¿Y su terapeuta?

R. La recomendación que extraigo de mis encuentros con ella pasa por tomar conciencia de que uno está vivo, y que podemos decidir liberarnos de la angustia.

P. ¿A qué tiene miedo?

R. Tengo miedo al miedo que nos tenemos unos a otros.

P. ¿Qué le gustaría ser fuera del cine?

R. De mayor me gustaría ser un hombre tranquilo. Dormir, comer y follar a gusto. Si yo durmiera por las noches tranquilo, y tuviera una sexualidad con muchos momentos de plenitud y tiempo de cocinar y de comer a gusto, mucho más no pediría.

P. Casi un programa electoral.

R. Sería un gran programa electoral.

Alberto San Juan, el viernes en Madrid.
Alberto San Juan, el viernes en Madrid.GORKA LEJARCEGI

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