Piel vieja
Eva Hache fingió sorpresa cuando su colaborador Ricardo Castella le dijo en Noche Hache (Cuatro) que el coche cargado de explosivos de Huelva era una buena noticia. Y era en efecto una de las buenas malas noticias que el jueves suele dar Castella; desgraciadamente, los viejos asesinos nunca mueren (por ahí anda Josu Ternera), pero también las nuevas generaciones de ETA quieren subir en el escalafón. Neutralizarlos antes de matar ha sido un respiro, quizá momentáneo. Los informativos del jueves noche y el viernes traían, junto a esa tragedia potencial, el espíritu de comedia de los más grandes roqueros viejos en existencia, los Rolling Stones, en el primer concierto de su gira española. Tiene algo de gnomo saltarín Mick Jagger, y se viste, fuera y dentro del escenario, como un joven: en Barcelona, chaquetilla roja de seda y camisola y pantalones negros muy ceñidos. Él puede, pese a lo encurtida que se le ve la piel de la cara. Y la voz no peor que la de otros sexagenarios de la lírica.
Sobre esto del mantenimiento del cuerpo fue interesante oír a Cristina Tárrega en Territorio comanche (Telemadrid). España es el país europeo donde más intervenciones de cirugía estética se hacen, 300.000 en el 2006. Tárrega había llevado a su plató a tres expertos en la medicina estética, y me impresionó lo que dijo el más joven de los tres, el doctor Javier Anido: ahora que la gente es más longeva, todos queremos vivir en un cuerpo más afín a nosotros. Estuve rumiándolo el resto de la semana, y la cosa carnal la vi al rojo en la parrilla televisiva. Por ejemplo, cuando Buenafuente (Antena 3) entrevistó el jueves a uno de los más veteranos actores de este país, Antonio Ozores, quien confesó que, siendo un vago, había hecho más de 160 películas y unas 200 obras de teatro, todas cómicas; no se sentía capaz de interpretar a Harlet (sic). Peores cosas se han hecho en teatro con el príncipe de Dinamarca. Oí a Ozores al volver del gran concierto en Madrid de Rufus Wainwright: la carne más fresca del pop actual.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.