_
_
_
_
_

Confusión sobre el supuesto coma del 'resucitado' polaco

El ferroviario recuperó hace 15 años la conciencia, aunque no el habla

Jan Grzebski, el ferroviario polaco que pasó 19 años en coma, según la noticia que este fin de semana dio la vuelta mundo, recuperó hace 15 años la conciencia, aunque no el habla, según informa el servicio de noticias Spiegel Online. La fuente del error la atribuye este medio alemán a que los periodistas polacos que realizaron la información no distinguieron entre coma y parálisis.

Al parecer, Grzebski sí estuvo en coma cuatro años, pero salió de ese estado y, después de un tiempo, ya se sentaba ante el televisor, aunque no podía hablar. Su mujer, Gertruda, declara ahora: "Janek no estaba en coma. Él entendía todo lo que le decía. Con la cara me expresaba si quería comer o beber". Sí es cierto que Grzebski recuperó el habla hace dos meses tras 19 años y, en ese tiempo, no salió a pasear o de compras. Grzebski dice que también vio a sus nietos y recuerda ahora que, cuando le pusieron a una de sus nietas sobre sus rodillas, "tenía miedo que se cayera porque era muy pequeña, y yo no tenía fuerzas para sujetarla".

Wojciech Pstrgowski, el enfermero que lo trató, declaró: "Estuvo 19 años paralizado y los cuatro primeros en coma". Destaca Pstrgowski que el enfermo se encontraba todo ese tiempo en buen estado, con aspecto alegre y los músculos bien desarrollados, y atribuye a los cuidados de la esposa el mérito de la recuperación.

Tres días de vida

El accidente que sufrió Grzebski ocurrió en 1988. Un vagón de tren le dio un golpe que le destrozó la mandíbula y le dejó ciego del ojo izquierdo. Tras pasar un mes en el hospital, los médicos le enviaron a casa y le daban tres días de vida, que finalmente se convirtieron en 19 años.

El catedrático de medicina Jan Talar, que trabaja en la clínica de comatosos en la ciudad polaca de Bydgoszcz, ha explicado, por su parte, que los pacientes se pueden encontrar en un estado vegetativo de conciencia mínima y pueden enterarse de lo que pasa, pero no controlan su cuerpo. Después de la enfermedad, en todo caso, se acuerdan de casi todo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_