El 64% de los actuales alcaldes se presenta a la reelección en los comicios del domingo

El 63,74% de los actuales alcaldes repite como cabeza de lista para las elecciones del próximo domingo. Los comicios municipales van a suponer un cambio significativo en el actual panorama, ya que más de un tercio de los primeros ediles no se presentará a la reelección para dar paso a los nuevos aspirantes. Eudel, la asociación que reúne a los 251 municipios vascos, considera que supone un porcentaje "significativo", que afectará inevitablemente a la futura composición de su ejecutiva. Casi la mitad de los 15 alcaldes que la componen (el 47%) no vuelve a presentarse a las elecciones.

Un total de 161 alcaldes, entre los que se encuentran los de las tres capitales, volverán a enfrentarse al reto de las urnas y comprobar si siguen manteniendo el tirón electoral que les llevó a liderar sus respectivos ayuntamientos durante los pasados cuatro años de mandato. Para otros llegó la hora del adiós. Es el caso de 91. Sus motivos para no seguir son muy diversos, pero uno aparece de manera invariable: el cansancio y la necesidad de dar paso a nuevos aspirantes.

Estas son las razones que invoca Borja Jauregi, regidor de Hondarribia con el PNV durante 12 años y que ha decidido no presentarse a la reelección. Además, es el responsable de los temas de vivienda en la ejecutiva de Eudel. "Me voy voluntariamente, porque quiero. Nadie me ha empujado a hacerlo", aclara de entrada. Jauregi no se considera "acabado", dice que se va pero con muchos proyectos encauzados. "Podía seguir, porque iniciativas no me faltan, pero 12 años son suficientes. El oficio de alcalde conlleva una vida de vigilia y empecé a sentirme cansado".

Cuando aparecen esos síntomas, "es mejor dejarlo", precisa. "No se puede monopolizar la silla y patrimonializar el poder. A mi sucesor le dejo una ciudad con muchos proyectos a punto: la regeneración del centro y solares para construir 400 viviendas protegidas".

Eudel ha hecho un análisis más pormenorizado por territorios para ver cómo se reparten las repeticiones y los abandonos. El 40% de los actuales alcaldes alaveses no repite, mientras que el porcentaje es en Guipúzcoa del 39% y en Vizcaya, del 35%. Por sexo, Guipúzcoa es la provincia con mayor número de alcaldesas que encabezan de nuevo la lista de su partido, con un total de 13. En conjunto, 26 mujeres vuelven a concurrir a las elecciones, lo que supone el 16% del total de candidatos que repiten.

Uno que sí vuelve a intentarlo es Tontxu Rodríguez, alcalde del PSE de Barakaldo, la segunda localidad más importante de Vizcaya tras Bilbao. Después de su experiencia como concejal (de 1991 a 1999), Rodríguez volvió a ejercer su profesión de abogado. El partido le recuperó y su nombre encabezó la lista en 2003. Ahora le toca revalidar aquel éxito.

"La misma ilusión"

Lo hace por varias razones: "Primero, porque el partido así lo ha querido. En segundo lugar, porque creo que aún quedan cosas por hacer, como culminar la segunda transformación de la ciudad con el ensanche y la transformación social del municipio".

Rodríguez tiene claro que un alcalde no debe permanecer en el cargo más allá de dos o tres legislaturas. "De momento, no he notado ningún cansancio ni nada por el estilo. Tengo la misma ilusión que cuando me presenté en 2003". "Uno", explica, "es alcalde las 24 horas del día y los 365 días del año. Lo asumo y dejo otras cosas en el camino. Afecta a tus relaciones cercanas, pero hay contrapartidas cuando ves que tu ciudad mejora y los ciudadanos te dan un empujón de apoyo en la calle". Según Rodríguez, "llegar a alcalde, presidente del Gobierno o Papa es lo máximo. Como tenemos un gran presidente del Gobierno y yo no tengo demasiada relación con la Iglesia, para mí lo máximo es ser alcalde".

Uno que piensa que su ciclo no ha terminado es el incombustible alcalde de Amurrio, Pablo Isasi (EA), que se somete al examen de las urnas por sexta vez. Cinco mandatos como alcalde no le han hecho perder "ni un gramo de ilusión". "La experiencia te hace ver que los proyectos son a medio y largo plazo, y te ayuda a resolver las cosas de una manera más fría y equilibrada".

Isasi apunta que tras 20 años como alcalde es difícil que se enfade. "Es más complicado que se produzca crispación, porque todo lo ves con más objetividad. Se puede tomar las decisiones con rapidez, pero no de una manera precipitada". Añade que se presenta "con la misma ilusión que la primera vez, pese a llevar toda una vida como alcalde. Hay pocas satisfacciones como trabajar para tu pueblo. Hay muchos proyectos por culminar".