Valentino desata la pugna entre Permira y Carlyle

Ni la moda más cotizada se libra de la lupa del capital riesgo. El fondo Permira le ganó por la mano el pasado miércoles a Carlyle y se convirtió en el primer accionista de la firma italiana Valentino -que ha vestido a celebridades como Sofía Loren y Jackie Kennedy Onassis- al comprar el 29,6% del capital por un montante de 782,6 millones de euros. Una operación que ejemplifica el auge del capital riesgo, con más liquidez que nunca para luchar por empresas de todos los sectores. La moda no iba a ser menos.

Permira acabó pagando una prima del 2% sobre el cierre de bolsa, y da así argumentos a los que piensan que la impaciencia de los fondos por sacar partido del dinero que entra en sus arcas está disparando el precio de las operaciones. Pero, sobre todo, dio un golpe de mano ante su competidor Carlyle, al que el mercado daba como el candidato ganador.Aún así, la guerra no termina de cerrarse. Permira anunció el viernes que está en conversaciones para hacerse con un paquete de acciones adicional, hasta superar el 50% del capital del grupo. El objetivo es forzar a Carlyle a arrojar la toalla definitivamente.

Valentino, que controla Hugo Boss, cerró el pasado año con unas ventas de 1.963 millones. Desde hace meses estaba en el punto de mira de los fondos de capital riesgo, que han redoblado su apuesta por el mercado del lujo y, al menos en el caso de Valentino, han disparado su cotización. Además de su participación en Valentino, Permira está presente en la española Cortefiel. Pero también en otros sectores, con Dinosol y Telepizza.