El primer parque solar de las comarcas de Girona, inaugurado en Riudarenes

Energía limpia, "sin ruidos ni contaminación". Es la gran apuesta del municipio de Riudarenes (Selva), donde acaba de entrar en funcionamiento el primer parque solar de las comarcas de Girona. La planta está equipada con más de 6.000 placas solares instaladas en un terreno de tres hectáreas en las afueras del pueblo, en la carretera vieja de Santa Coloma de Farners.

"Hemos tenido algún retraso por culpa del papeleo, pero ya está en marcha", se muestra satisfecho el alcalde de Riudarenes, Jordi Gironès. El Ayuntamiento de la localidad ha apoyado plenamente la construcción de la central para demostrar su apuesta por las denominadas energías limpias y para contrastar el impacto que supondrá la instalación de una subestación de la línea de alta tensión (MAT) que está previsto que atraviese el municipio. Riudarenes también está afectada por el paso del AVE, una infraestructura que rechazan los vecinos y que provocó acciones de protesta similares a las que actualmente encabezan los municipios del Alt Empordà.

Réplica a la MAT

El alcalde de Riudarenes, Jordi Gironès, reconoce la extensión de la planta, pero considera que tiene un impacto visual "mucho menor" al de las torres de alta tensión, "de 50 o 60 metros de altura" y, de alguna forma, pretende ser un "modelo alternativo" y una referencia para los municipios de Girona. "Queremos demostrar que no sólo es una cuestión de imagen. Las energías limpias funcionan, dan servicio y tenemos que apoyarlas", asegura Gironès. El alcalde no ha entrado en detalles sobre el coste económico del parque solar, aunque se calcula que en unos cinco años podría amortizarse y comenzar a ser rentable. Además, la generación de energía a través del sol ahorra la emisión de 1.200 toneladas de CO2 anuales a la atmósfera.

El emplazamiento de los paneles, que tienen una altura de dos metros y medio, se decidió teniendo en cuenta las horas de insolación y también se intentó "minimizar" el impacto visual del conjunto. Para ello, se ha rodeado el perímetro del parque con una valla de vegetación artificial que pretende integrarse con el entorno. La planta generará una potencia de 1,5 millones de kilovatios por hora, o el equivalente a la energía que consumen unos 800 hogares, y estará conectada a la red de Fecsa-Endesa. La instalación es propiedad de la empresa Productherm de Fornells de la Selva (Gironès).

La apuesta de Riudarenes por las energías alternativas es rotunda. De hecho, ya ha aprobado y anunciado la próxima entrada en funcionamiento de un segundo parque solar de 12.000 placas. "Esperamos tener menos trabas burocráticas que con el primero", apuntó Gironès. La empresa Productherm también está detrás del nuevo proyecto y el gerente, Txemi Mateu, se muestra satisfecho por la buena acogida. Mateu ha avanzado que están trabajando en dos proyectos solares más en Girona.