Los musulmanes piden paso en las listas

La única formación política con representación en las instituciones españolas que se puede acuñar como musulmana es la Coalición por Melilla, que lidera Mustafá Aberchán, ex presidente de la ciudad autónoma. Ningún municipio andaluz tiene algo equivalente. Las entidades islámicas creen que la inclusión de candidatos musulmanes en las listas electorales es deseable porque favorecería la integración social y contribuiría a eliminar prejuicios religiosos. Tal vez en el futuro ocurra.

A la hora de votar, las organizaciones no dan directrices homogéneas a los fieles con derecho a pronunciarse en las urnas el próximo 27 de mayo, una minoría en Andalucía porque el grueso de los musulmanes que viven en la comunidad son inmigrantes llegados en los últimos años y, por tanto, imposibilitados legalmente para votar o ser elegidos. Sólo los españoles convertidos al islam o los extranjeros nacionalizados podrán apoyar el próximo 27-M una lista para gobernar su municipio.

¿Y aconseja algo el islam para estas elecciones? De las entidades consultadas se pueden extraer algunas sugerencias comunes. La primera: se anima a participar activamente. La segunda: apoyar a quienes les apoyan. El nombre y los apellidos depende del votante islámico.

Mansur Escudero, por ejemplo, es el más explícito. Abiertamente recomienda que se vote a partidos políticos progresistas porque considera que defienden la libertad religiosa, y por tanto los intereses de la comunidad islámica. "El PP se manifiesta de forma muy hostil, lo estamos viendo en ciudades como Badalona o Melilla", indica Escudero, que preside la Junta Islámica de España, además de ser el representante para Europa y América latina del Liderazgo Islámico Mundial.

El rechazo del PP a la construcción de mezquitas o su obstrucción a la enseñanza del islam en los colegios son citados por Escudero para ilustrar la animadversión que, en su opinión, tiene esta organización. "Sería bueno para la integración que los partidos incluyeran a candidatos musulmanes", indica.

El propio Escudero ha sido tentado en dos ocasiones por PSOE e IU para incorporarse a sus candidaturas en comicios anteriores. A pesar de que defiende la incorporación de candidatos islámicos, él prefirió rechazar la invitación: "Consideramos que era mejor una posición neutral".

El imán de la mezquita La Paz, en Granada, Abdul-Qader Qamhiyeh, también cree que habría que "formar" a personas para que en el futuro se puedan incorporar a la política activa. Desde esta mezquita, abierta en 2001, anima a los fieles a participar: "Les pediría que sean sensatos y piensen con su mente y su corazón". El imán sostiene que en estos comicios debe elegirse a personas, no tanto a partidos. "No valoramos trajes, ni coches, sino el proyecto en sí y a las personas que están detrás".

Algo similar sostiene Malik Ruiz, presidente de la Comunidad Islámica en España, que gestiona la mezquita mayor de Granada y promueve la de los Bermejales en Sevilla. "La experiencia nos dice que hay que tratar a las personas, hay lugares donde el PP nos trata muy bien y otros donde se nos maltrata de forma sistemática", aduce. En Sevilla, por ejemplo, el PP se alineó contra el proyecto de la mezquita en el barrio sevillano, que cuenta con el rechazo de la asociación de vecinos Bermejales 2000. "Para nosotros es sorprendente que los proyectos en las grandes ciudades tengan tantas pegas, nos gustaría que los políticos hicieran un esfuerzo por favorecer la visión del islam", plantea.