Los promotores preven un exceso de oferta de unas 20.000 viviendas

La producción de vivienda en la Comunidad Valenciana tocó techo en 2005. Los tres primeros meses de 2007 confirman la tendencia descendente del número nuevas edificaciones que arrancó el año pasado. Pero el desplazamiento de los grandes inversores hacia mercados más baratos ha agudizado los problemas de ajuste entre producción y demanda. Los propios promotores estiman un exceso de oferta en torno a las 20.000 viviendas al año.

Benjamín Muñoz, secretario general de la Asociación de Promotores Inmobiliarios, dibujó ayer la situación: "En la Comunidad Valenciana se construyen anualmente cerca de 100.000 viviendas; 40.000, en Alicante; unas 35.000 en Valencia y 25.000 en Castellón". La cuarta parte de las nuevas edificaciones corresponden a vivienda vacacional. La demanda convencional en los últimos años se cifra "entre 60.000 y 80.000 viviendas", según explicó Muñoz.

En años anteriores, grandes inversores institucionales compraban sin pestañear el parque sobrante, pero los precios se han disparado de tal modo que los grandes clientes de vivienda vacacional se han desplazado hacia países del Norte de África o del Mediterráneo Oriental y los grandes compradores de primera vivienda nueva fijan su objetivo en los países de Europa del Este.

Como resultado: "Se están produciendo unas 20.000 viviendas más, que antes los inversores nos compraban", concluyó Muñoz. El problema es extrapolable al ámbito estatal, según el secretario de las patronales de promotores autonómica y provincial, que cifró "la demanda estable" en torno a las 400.000 viviendas al año cuando la producción actual ronda las 600.000. A finales de 2005 se habían construido en España en torno a 800.000 nuevas viviendas.

A pesar del desajuste, Ignacio Pindado, consejero delegado del Grupo I, una consultora especializada en el mercado de la vivienda con 26 años de experiencia, afirmó que "en un corto espacio de tiempo, el mercado se ha ajustado bastante bien". La producción empezó a caer en 2006. En el caso específico de la provincia de Valencia -objeto de un estudio que presentó la consultora- la producción cayó un 4% en 2006 a pesar de la notable presión demográfica y del colchón que representa la demanda de vivienda vacacional.

El descenso de demanda lleva aparejado un descenso de precios. Grupo I estima en un 3,9% el alza de precios para el conjunto de España en el primer trimestre de 2007 respecto al mismo periodo del año anterior. En la provincia de Valencia, sin embargo, los precios subieron un 8,5% respecto al primer trimestre de 2007. Sin embargo, el alza tiende a atenuarse y Grupo I estima que rondará el 5% a finales de 2007.