Un programa sudista

El programa del PP es sudista y su candidato, el jefe del Consell Francisco Camps, como el personaje de Scarlett O'Hara en Lo que el viento se llevó, está dispuesto a defender la prosperidad de las haciendas ante un ejército de confederados integrado por socialistas, catalanistas y republicanos.

No es cuestión de imaginación, sino de compromiso y el candidato del PP a la Generalitat lo formalizó ayer. Camps presentó el programa electoral del PP con 1.700 propuestas para mejorar la vida de los valencianos y se comparó asimismo con Scarlett O'Hara. Tanto fue así que Camps, sin llegar a poner a Dios como testigo, hizo el gesto de coger entre sus manos un puñado de tierra, "de Morella o de La Vega Baja", y aseveró: "Me comprometo a que nadie agachará la cabeza de los valencianos, nunca. Nadie nunca va a decir qué somos o lo que tenemos que ser". Que se enteren los del "tripartito", esos que tienen "un contraprograma gris y mediocre que habla de una Comunidad Valenciana que no existe más que en la mente de cuatro y dice no al futuro de la Comunidad Valenciana".

Lo había adelantado el director de la campaña electoral de Camps, el también consejero Vicente Rambla, que tachó al resto de partidos de ser "uniones temporales de empresas (UTE) capaces de cualquier cosa por el hecho de gobernar". Un Rambla que también se lamentó de tener como "principal adversario al Partit Socialista del País Valencià -con mucho acento-, que ni siquiera se llama con el nombre oficial de la Comunitat" y que está liderado por Pla dispuesto a ganarse el gobierno "en los despachos de los radicales". Y si es así, ya sabe Rambla que "la lengua catalana empezaría a ser impuesta en los colegios y en la Administración", por no hablar de los efectos catastróficos sobre la economía de la moratoria urbanística -"400.000 empleos menos y 30.000 VPO para jóvenes en peligro"-, la legalización de las drogas y otras cosas malas. Muy malas.

Pero ayer, el protagonista no era el director de campaña del PP, que parecía un teniente ordenando las tropas antes de entrar en combate, sino el presidente de la Generalitat que aspira a la reelección tras el próximo 27 de mayo.

Así, que el auditorio Mar Rojo de L'Oceanogràfic de Valencia -otra vez las imágenes, otra vez las metáforas-, fue sacudido por una ola de aplausos populares de los centenares de candidatos municipales y autonómicos que se levantaron de sus asientos mientras Camps arengaba por a la caballería antes de dar la orden de carga -"Somos los mejores y vamos a seguir siendo los mejores"- y dar por concluido el acto.

Pero por qué dijo Camps que eran los mejores. Sobre todo por la comparación que hace de su partido con el resto de formaciones, a los que sólo une, en su opinión, la vocación de sacar al PP de los gobiernos autonómico, provinciales y municipales. El dirigente popular utilizó un tono didáctico para exponer sus argumentos que, resumidos, son los siguientes. 1/ El PP ofrece el mismo discurso en todas partes. 2/ El programa electoral está avalado por años de gobierno y de trabajo bien hecho. 3/ El proyecto popular es valenciano y valencianista y compatible con España y Europa. Y 4/ Cuando gobernaron los socialistas fue una catástrofe para la Comunidad Valenciana.

Camps abrió paréntesis para explicar los méritos de su gestión. "Hemos creado 350.000 puestos de trabajo en el mismo periodo de tiempo que los socialistas destruyeron 20.000 puestos de trabajo", prosiguió Camps, "Solo el PP garantiza empleo, mucho empleo. Nadie le gana al PP en la defensa de nuestro territorio y del medio ambiente". Y luego dio muestras de perseverancia, de esa cualidad que se mantiene llueva o haga sol. "Hemos conseguido hacer del agua el eje central de estos cuatro años, de lo que nos corresponde y es justo. Por eso, tal y como recalcó el jefe del Consell y candidato del PP a la reelección, "seguiremos exigiendo el trasvase del Ebro y el trasvase del Júcar al Vinalopó tal y como estaba aprobado".

Contigo hacemos 1.700 propuestas para mejorar tu vida -que es como se llama el programa electoral de los populares- ya está en la calle y los candidatos del PP las difundirán a partir de ahora a los cuatro vientos en la Comunidad Valenciana. Ese viento que, según Camps, se llevó a los socialistas en 1995 y que ahora desea que arrastre a los candidatos del PSPV hasta la oposición allí donde gobiernen.

Hoy en El Puig, Camps reclamará para el PP el voto regionalista, porque, según dijo: "Sólo nosotros estamos orgullosos de ser valencianos".