La actividad económica inducida por la sanidad pública supone 1.505 millones al año

Además de ser un pilar fundamental del estado de bienestar, la actividad de la sanidad pública también contribuye a producir riqueza y es un motor de gasto que dinamiza la economía. Según un estudio realizado por el Departamento de Sanidad, el gasto corriente y la inversión inducida por la sanidad pública vasca en el año 2001 produjeron un impacto en el Producto Interior Bruto (PIB) de 1.505 millones de euros, lo que supone el 3,52% de la riqueza generada por la economía vasca ese año. Es decir, 3,5 euros de cada 100 de riqueza son fruto de la sanidad. Se trata de un estudio realizado con carácter interno que toma como referencia ese año, pero que mantiene plena vigencia en estos momentos y es extrapolable a la actual coyuntura.

El estudio trata de poner de relieve que la sanidad pública mejora la salud de la población, su calidad de vida y la cohesión social "en la medida en que las actuaciones desarrolladas en el sistema sanitario equilibran la igualdad de oportunidades entre colectivos". Estos aspectos se dan por supuestos en un sistema sanitario, pero lo que trasciende menos es su capacidad de crear riqueza y empleo, y no sólo de gastar. Ese gasto de la sanidad ejerce un importante peso sobre la economía en su conjunto, a través de los efectos multiplicadores que provoca sobre otros sectores de actividad y el papel que desempeña como factor estratégico en la creación de empleo y en el mantenimiento de la demanda.

Es en este contexto donde se realiza el estudio con el fin de comprobar el impacto económico del gasto y la inversión en sanidad de la administración pública en términos de PIB, empleo y generación de ingresos para las haciendas vascas, vía recaudación de IRPF, IVA e Impuesto de Sociedades. El punto de partida del estudio es el gasto inducido por el departamento en 2001, incluyendo además aquellos gastos ligados íntimamente a la sanidad pública, como son los pagos a Osakidetza por parte de terceros, los pagos de los pacientes en medicamentos, transporte al hospital, comida, así como los derivados de los congresos médicos celebrados en el País Vasco.

En total, se parte de un gasto directo de 1.947 millones de euros. La sanidad es, por ejemplo, un motor económico que produce riqueza directa y dinamiza otros sectores como los laboratorios, equipamiento sanitario, docencia, construcción, transporte, limpieza, hostelería.

Recaudación de impuestos

Además del impacto en el PIB, el estudio refleja que el total de empleos mantenidos ascendió a 34.018, lo que equivale al 4% del empleo de la comunidad autónoma. Teniendo en cuenta que la plantilla de Osakidetza ronda las 22.000 personas, el resto corresponde a otros sectores de actividad. En cuanto a la recaudación de impuestos para las tres haciendas, ésta ascendió a 330 millones de euros, lo que supone el 18% del presupuesto del Departamento de Sanidad. Así, 1 de cada 5 euros destinados a la sanidad por parte del Gobierno vasco retornaron posteriormente a las arcas públicas vía recaudación de impuestos.

En términos comparativos, el impacto producido por el gasto de la sanidad pública representó algo más del 50% del PIB del sector de la construcción de Euskadi en el año 2001. Con relación al empleo, el número de puestos de trabajo mantenidos casi triplicó a los del sector de la automoción de la comunidad autónoma y fue 2,4 veces superior al empleo que mantuvo el sector de la banca. Los ingresos generados para la hacienda, por otra parte, representaron casi el 5% de la recaudación total de impuestos por IVA, IRPF y el de Sociedades, que es el que grava a las empresas.

El impacto económico del gasto e inversión en sanidad del Gobierno vasco refleja unos resultados equilibrados en los tres territorios en cuanto a la generación de riqueza y empleo. En Vizcaya, se generaron 779 millones de PIB (el 51,7% del total producido por el gasto sanitario), se mantuvieron 17.654 empleos (51,9%) y se recaudaron 181 millones de euros en concepto de impuestos (54,8% del total).

En cuanto a la provincia de Álava, fueron 266 millones de euros de PIB (17,6%), se mantuvieron 5.830 empleos (17,1%) y se recaudaron 47 millones de euros (14,2%).

En Guipúzcoa se obtuvieron 460 millones de Producto Interior Bruto (30,5%), se mantuvieron 10.534 empleos (30,9%) y la hacienda foral guipuzcoana recaudó un total de 101 millones de euros (30,6%). Se trata de un reparto muy ajustado y equilibrado al peso específico que tiene cada una de las tres provincias en el conjunto de la comunidad autónoma del País Vasco.

El gasto realizado por el Departamento de Sanidad en el periodo 1999-2005 presenta un incremento global del 53% para el conjunto del periodo. La situación general del gasto sanitario público se ha caracterizado por registrar incrementos anuales superiores a los de la economía general. Las tasas de variación anuales han superado el 7% desde el año 2001, llegando durante 2005 a rebasar el 9% de incremento con relación al año anterior. En términos de gasto por habitante, se ha pasado de los 778,7 euros en el año 1999 a más de 1.160 durante 2005.

Esta tendencia se consolida durante los años 2006 y 2007. En el caso de este año, el departamento prevé gastar 1.365 euros por habitante. En los presupuestos generales del Gobierno vasco para 2007, el gasto en sanidad supone más de un tercio del total de los fondos públicos. El Departamento de Sanidad es el que cuenta con el mayor desembolso por delante de Educación, que se coloca en segundo lugar. Estas posiciones se han mantenido invariables en los últimos años dentro de las grandes cuentas de la comunidad.