_
_
_
_
_
Reportaje:

Vandalismo en el último tren

La estación de Sabadell Sud registra cada fin de semana episodios de violencia entre adolescentes que salen de las discotecas

Sucede cada sábado. A las 10 de la noche termina la sesión de tarde de las discotecas y bares musicales de la Zona Hermética de Sabadell. La fiesta concluye para centenares de jóvenes, en su mayoría menores de edad, que llegan en tropel a la estación de Renfe Sabadell Sud. Entre las 10 y las 11 sólo salen dos trenes con destino Barcelona: el primero, a las 22.41, y el siguiente cuatro minutos más tarde. La estación se convierte durante media hora en un hervidero de adolescentes.

El pasado fin de semana la primera en irse en ambulancia fue una joven, bastante mareada, que resbaló y se rompió un diente. Lo comentaban sus amigos, entre risas, mientras intentaban hablar con ella por el móvil. En menos de 15 minutos hubo dos heridos más. Uno terminó con la cara ensangrentada y el otro con la mano rota.

La policía autonómica llega todos los sábados a la estación hacia las diez de la noche
Más información
Las estaciones conflictivas

Cuando los Mossos se desplegaron en el Vallès Occidental el pasado noviembre, una de sus primeras acciones fue montar un dispositivo especial en la estación Sabadell Sud. La policía autonómica llega todos los sábados hacia las 22.15. Hay siempre una patrulla y una furgoneta de la policía. Según los Mossos, su presencia es, de por sí, disuasoria. Los agentes cuentan con una formación específica para actuar en casos de conflicto. Por su parte, el dispositivo de seguridad que tiene Renfe, informa un portavoz, consiste en "unos 30 vigilantes de seguridad", que varían en función de las necesidades operativas. Estos vigilantes viajan en los trenes desde Barcelona hasta Sabadell Sud durante la tarde y la noche de los sábados, distribuyéndose por las estaciones intermedias para la custodia de las estaciones y la prevención de actos vandálicos, precisa el portavoz oficial.

El pasado fin de semana, la trifulca empezó hacia las 22.15, con el andén lleno de adolescentes, algunos con cara de fatiga y otros con una considerable borrachera encima. Hubo una bronca a las puertas de la estación. Un responsable gritó a los vigilantes de seguridad que bajaran rápido al andén. Uno de estos vigilantes no pudo evitar la exclamación "¡Qué desmadre!". En segundos empezó otra pelea a pie de vía. La disputa se produjo porque un chico se alteró al ver que otro miraba a su novia. La actuación de los Mossos y de los agentes de seguridad fue rápida. A los que tenían ganas de pelea, se les intentó calmar. No hubo detenciones y una ambulancia se llevó a los dos heridos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El otro incidente lo protagonizó un grupo de cinco chavales -el mayor no superaba los 11 años- que acabaron sentados en un banco, fuera de la estación. Son viejos conocidos. Se divierten lanzando piedras a los vagones. Una patrulla los acompañó a casa.

Fue una noche ajetreada. El furgón de los Mossos se tuvo que ir porque había una pelea en una discoteca de la zona. Poco antes había habido un atropello intencionado, aunque no hubo que lamentar heridos graves. Según los Mossos, por la noche en la Zona Hermética se llegan a concentrar unas 10.000 personas. Con tal cantidad de gente, la policía considera que "ésta es una zona de ocio bastante tranquila. No hay demasiadas incidencias", aseguran.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_