El Banco de España prevé un crecimiento del 3,7% este año, más que lo estimado por Solbes

En una iniciativa inédita hasta ahora, el Banco de España publicó ayer una nota con sus previsiones sobre la economía española para 2007 y 2008. Según el organismo supervisor, España mantendrá un crecimiento robusto este año, con un incremento del 3,7% sobre el PIB de 2006. Su cálculo mejora incluso en tres décimas la última estimación del Ministerio de Economía y atrasa los primeros indicios claros de desaceleración a 2008. La institución que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez plantea al Gobierno que programe "objetivos más ambiciosos" de superávit público.

El Ministerio de Economía, en cumplimiento de una reciente reforma legal, envió ayer a las comunidades autónomas un estudio sobre las perspectivas de la economía española hasta 2010. El objetivo de ese informe es analizar la evolución de la economía y fijar, conforme a esa predicción, el objetivo de estabilidad presupuestaria de las comunidades. En esencia, el Gobierno repite sus últimas estimaciones: un crecimiento del 3,4% para 2007, frente al 3,9% de 2006, y un superávit público equivalente al 1% del PIB (1,8% en 2006).

El estudio también estima un crecimiento anual en todos los años del periodo 2007-2010 superior al 3%, justo el límite que obliga a las comunidades a lograr superávit en sus cuentas. Para elaborar este informe, el ministerio consultó al Instituto Nacional de Estadística (INE) y al Banco de España, tal y como marca la nueva ley. El INE comunicó que no tenía ninguna observación que hacer. Por el contrario, el Banco de España envió una completa predicción sobre la evolución económica en 2007 y 2008.

Los datos básicos de la proyección del Banco de España se reflejan en el estudio enviado por Economía a las comunidades. Pero es que el Banco de España publicó también ayer el análisis completo con el que atendió la consulta del Gobierno. Un gesto inédito al que seguirán otros. "El Banco de España tiene la intención de publicar de forma regular estas proyecciones, con el objetivo de reforzar la transparencia sobre el diagnóstico de la situación de la economía española", afirmó en un comunicado.

Del análisis del Banco de España destaca que su previsión de crecimiento para 2007, un 3,7%, es superior en tres décimas a la que ha hecho el Ministerio de Economía (3,4%). Los analistas del organismo supervisor mantienen que "en conjunto, es probable que la actividad siga creciendo en 2007 a un ritmo similar al del año precedente, y que sólo en 2008 se produzca una desaceleración del PIB más marcada".

El Banco de España cree que la mayor desaceleración se producirá en 2008 (3,1% frente al 3,7% de este año), mientras que el Ministerio de Economía apunta que la caída en el ritmo de crecimiento será más acusada este año que en 2008. En cuanto a las razones de la desaceleración, el Banco de España coincide con el vaticinio general del ministerio: "pérdida de dinamismo del consumo privado y de la inversión residencial, como consecuencia de los efectos retrasados de las subidas de los tipos de interés".

Según la estimación del Banco de España, el incremento anual de la demanda interna se moderará en 2007 (4,6%) para caer de forma más notable en 2008 (3,6%). En ese escenario, el crecimiento económico sólo podrá mantenerse por encima del 3% si se consolida la mejora del sector exterior y de las condiciones competitivas de la economía española (entre otras, la inflación). Según el Banco de España, esa mejora será apreciable en 2008, cuando el saldo negativo entre importaciones y exportaciones sólo detraerá 0,5 puntos porcentuales al crecimiento económico, la mitad que en 2006.

La moderación del crecimiento lleva al Banco de España a advertir de que los "buenos resultados fiscales de los últimos años", con ingresos siempre por encima de lo previsto, pueden no repetirse al terminar los efectos "extraordinarios en la recaudación" del boom inmobiliario. Aun así, cree que las previsiones de superávit en las cuentas públicas se quedan cortas (lo eleva al 1,3% del PIB frente al 1% estimado por Economía).

Presupuestos expansivos

En este punto, el organismo supervisor marca distancias. Coincide con Economía en la necesidad de "prolongar la senda de superávit de los dos últimos años" para contribuir a la "contención de la demanda interna". Pero, a su juicio, los objetivos presupuestarios fijados por el ministro de Economía, Pedro Solbes, para el conjunto de las Administraciones Públicas en 2007 y 2008 son "moderadamente expansivos".

"Hay margen para establecer objetivos más ambiciosos", mediante una mayor contención del gasto público que deberían compensarse con "ganancias de eficacia en la gestión de determinados servicios públicos". Una ecuación que se traduciría en superávit más elevados que los previstos por Economía. Algo necesario, en opinión del Banco de España, "si se tiene en cuenta la presión sobre el gasto público que pudiera representar el envejecimiento de la población".