Manises estrena la terminal que debe cubrir sus necesidades para cuatro años

El aeropuerto de Manises estrenó ayer la terminal regional que amplía un tercio su capacidad operativa y debe cubrir sus necesidades durante los próximos cuatro años, según las estimaciones de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA). El edificio de Francisco Benítez culmina las obras previstas por el Gobierno para adaptar Manises cara a la disputa de la Copa del América, que incluyen la ampliación de 500 metros de pista para acoger vuelos transoceánicos y un aparcamiento capaz de albergar 1.400 vehículos más. Las obras han supuesto una inversión de cien millones de euros.

El aeropuerto de Manises fulminó en 2005 las previsiones de tráfico de pasajeros que AENA incluía en la programación elaborada en 2000 y cara a 2015. La empresa que gestiona los aeropuertos españoles, una entidad pública vinculada al Ministerio de Fomento, estimaba que el número de pasajeros que pasan por Manises se doblaría a lo largo de los primeros quince años del siglo XXI, desde dos a cuatro millones y medio de viajeros.

El número de pasajeros que embarcaron o desembarcaron en el aeropuerto de Manises a finales de 2006 rozaba los cinco millones. Entre 2001 y 2006, Manises ha ganado cinco puestos en el registro de aeropuertos españoles por tráfico de pasajeros con un crecimiento acumulado del 215% sin parangón en términos porcentuales.

AENA estima ahora que 6,5 millones de viajeros utilizarán el aeropuerto de Manises en 2010, un 30% más que a finales de 2006. Pero la proliferación de nuevas ofertas de vuelos baratos y el creciente atractivo de la ciudad de Valencia como destino turístico amenazan con fulminar esas previsiones en breve.

El tráfico de pasajeros que acumula el aeropuerto de Manises en los dos primeros meses de 2007 arroja un crecimiento porcentual próximo al 23% sobre el mismo periodo de 2006 y, una vez más, sin parangón con el resto de aeropuertos de toda España. El inicio de las primeras regatas entre aspirantes a disputar la posesión de la Copa del América, dentro de dos semanas, coincide con el estreno de los vuelos transoceánicos en Manises, con la llegada de un vuelo desde Montreal, Canadá.

El nuevo aparcamiento, capaz de albergar 1.400 vehículos más y con varias plantas cubiertas fue inaugurado el pasado mes de febrero.

La apertura al público de la nueva terminal, adosada a la anterior, pasó prácticamente desapercibida para los usuarios. A las puertas de embarque A, B, C y D, se suman ahora las puertas R. Sólo la luminosidad y aparente ligereza que provocan las paredes de vidrio marca el tránsito de un edificio a otro.

Los técnicos de AENA explican que la terminal está dividida en dos espacios, por un lado, el procesador, continuación del edificio terminal actual, que cuenta con planta sótano, baja y primera. La zona de facturación, en la primera planta, cuenta con 12 nuevos mostradores. Hasta la fecha, apenas se ha instalado una tienda del Valencia CF en el nuevo espacio para comercios, oficinas de compañías aéreas o oficinas de información. Una serie de azafatas servían ayer la información a los pasajeros ante los mostradores de embarque, sin espacio propio.

Las nuevas instalaciones acogen también nuevos filtros de seguridad para la zona de aviación regional en los que se incorpora la inspección automatizada de los equipajes en bodega.

La planta baja alberga la zona de recogida de equipajes y oficinas de alquiler de vehículos, de compañías aéreas y de equipajes perdidos.

Un edificio satélite con 2.400 metros cuadrados en el nivel de la pista de aterrizaje distribuye a los pasajeros hasta las diez nuevas puertas de embarque, que funcionan tanto para salidas como para llegadas, y permiten atender hasta cinco aeronaves de menos de cien pasajeros, las propias de aviación regional, a la vez. La zona de pista ofrece espacio para otros nueve aparatos.