El fiscal acusa de asesinato al hombre que mató a otro arrojándolo al metro

La fiscalía atribuyó ayer un delito de asesinato al hombre que el pasado 21 de febrero mató a un vendedor de cupones arrojándolo a las vías del metro de Barcelona cuando pasaba un convoy. La familia de la víctima, que ejerce la acusación en el caso, entiende que concurre la agravante de disfraz, ya que el joven habría cometido el crimen cubriéndose con una capucha.

El presunto homicida abandonó ayer durante unas horas el módulo de psiquiatría de la cárcel de Brians para que la juez instructora le informase de la acusación que pesa sobre él, siguiendo los trámites previstos en la Ley del Jurado. David Z. G. entró en el juzgado escoltado por varios agentes de la Guardia Civil y, según explicó el abogado que representa a la familia de la víctima, Raúl Huertas, "no mostró mucho interés", llegando incluso a cerrar los ojos durante el cuarto de hora que duró la comparecencia. Huertas pidió a la juez instructora que tome declaración a los testigos de los hechos, quienes comparecerán el próximo 26 de marzo, y que se visione el vídeo de las cámaras de seguridad del Metro, "donde al parecer se aprecia y se ve que este señor es el autor del delito".

Ester Capella, la abogada del acusado, pidió que el presunto homicida sea sometido a un examen médico-forense para determinar si padece problemas psicológicos.