El Prado e Italia se dan cita en Alaquàs

Alaquàs tiene un castillo. Fue erigido en el siglo XVI, con un estilo tardo gótico y renacentista; y declarado monumento artístico nacional en el primer tercio del siglo XX. Gracias a esta declaración se evitó su destrucción, que había empezado por la torre noroeste. La valiosa madera de sus vigas y techumbre era muy codiciada. Un movimiento cultural y cívico logró entonces llamar la atención y mantener en pie el castillo y sus preciados artesonados. Más tarde, durante el franquismo, pasó a manos privadas de la familia Lassala, y acabó siendo sede de bodas, bautizos y comuniones (la BBC alternativa, que dicen los profesionales del vídeo y la fotografía).

Desde 2003 forma parte del patrimonio de la población de L'Horta Sud tras una polémica expropiación y un accidentado litigio que ha finalizado con un acuerdo entre el Ayuntamiento, gobernado por el socialista Jorge Alarte, y sus antiguos propietarios. Atrás quedaron las acusaciones de expolio de parte de los valiosos azulejos del castillo y de otros componentes del conjunto arquitectónico.

La fortificación del siglo XVI se convertirá en un centro cultural público

A finales de este mes, está prevista la inauguración y presentación de las obras de rehabilitación del castillo. Por ello, el Ayuntamiento ha organizado una ambiciosa exposición que reunirá en Alaquàs algunos cuadros del Museo del Prado, siempre remiso a prestar obras emblemáticas, como el conocido retrato de Felipe II, de Sofonisba Anguissola, que viajará hasta L'Horta. Y también lo hará el lienzo de uno de los más grandes pintores de la historia del arte, Michelangelo Merisi, más conocido como Il Caravaggio, de quien se verá San Francisco en meditación.

El común denominador de las cerca de 60 obras que conformarán la exposición Realismo y espiritualidad es poner de relieve las estrechas relaciones entre Italia y España durante los siglos XVI y XVIII. En particular, se ahonda en las vinculaciones con Cremona, hermanada con Alaquàs. De hecho, el Museo Cívico 'A la Ponzone' de la ciudad lombarda presta buena parte de las obras de la muestra, como el cuadro de Caravaggio. El Escorial y el Museu Nacional de Catalunya también participan en la exposición cuyos comisarios son Jaume Coll, director del Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí, e Ivana Iotta, directora del Museo Cívico de Cremona.

Además del maestro del tenebrismo, cabe destacar la presencia de la gran retratista de la Corte de Felipe II Sofonisba Anguissola, de su hermana Lucía, y de Antonio Campi.

El Ayuntamiento de Alaquàs espera contar con una nutrida y muy distinguida comitiva inaugural, por lo que aún no se aventura en dar la fecha exacta de apertura de la muestra, a la espera de las confirmaciones. En cualquier caso, se prevé inaugurar la muestra a finales de este mes.

Entonces las pinturas rivalizarán con el propio castillo a la hora de centrar la atención del visitante. La intervención arquitectónica de restauración y rehabilitación, que ha incluido la reconstrucción de la cuarta torre destrozada, ha superado los cuatro millones de euros, aportados íntegramente por el Ministerio de Fomento, a cargo del 1% cultural.

La pretensión del Ayuntamiento, enclavado en el llamado cinturón rojo de Valencia, es convertir el castillo de Alaquàs en un gran centro cultural. Se han recuperado los artesonados y se puede hacer una lectura cronológica de la azulejería, integrada por piezas desde el siglo XV hasta el XIX.