Telefónica decide apoyar a Sonae en la pugna por Portugal Telecom

Telefónica se ha decantado a favor del grupo industrial Sonae en la pugna que mantiene por hacerse con el control de Portugal Telecom (PT). La operadora española, que posee el 9,96% de PT, votará en la junta de accionistas a favor de que se elimine la restricción que limita la participación al 10% de las acciones. De aprobarse la medida, se allanaría el camino a Sonae, que ha lanzado una oferta pública de adquisición (OPA) sobre la operadora lusa.

Sonae ya tiene un aliado en su intento, hasta ahora infructuoso, de hacerse con el control de Portugal Telecom. Telefónica desveló ayer por fin su postura para acallar especulaciones. La empresa española evitó pronunciarse directamente sobre la OPA lanzada por Sonae, a través de filial Sonaecom, pero anunció que en la próxima junta de accionistas de PT, que se celebrará el próximo 2 de marzo, votará a favor de suprimir el límite que impide en la práctica superar el 10% del capital.

Esta limitación es el principal escollo para que Sonae pueda hacerse con el control efectivo de la operadora portuguesa ya que, incluso aunque tuviera una participación mayoritaria de Portugal Telecom, no podría ejercer en la práctica la gestión de la operadora.

Telefónica, que es el principal accionista de PT con el 9,96% de las acciones, aseguró ayer que en la próxima junta votará a favor de que se "aprueben las modificaciones estatutarias y autorizaciones planteadas para suprimir las limitaciones al voto para que todos los accionistas puedan manifestarse", según el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La toma de posición de Telefónica se produce justo dos días después de que el consejo de administración de PT rechazara la la nueva propuesta de la portuguesa Sonaecom de 10,5 euros por título de la operadora portuguesa.

El grupo industrial elevó el pasado día 16 en un euro el precio inicial de la OPA, desde los 9,5 euros. En la votación se abstuvo la compañía española.

El presidente de PT, Henrique Granadeiro, ya ha anunciado que no recomendará a sus accionistas que acudan a la OPA de Sonaecom, que está condicionada a la adquisición de al menos un 50% más una de una de las acciones.

En el fondo de esta batalla por PT late un conflicto entre el Gobierno portugués y Sonae. Telefónica se ha aliado con el grupo industrial porque el triunfo de la OPA pondría en valor una participación que, con los blindajes actuales, tiene sólo un valor financiero. Además, la compañía española ve mucho más factible llegar a un acuerdo con Sonae para hacerse con el 50% de Vivo que controla PT, la operadora brasileña de la que Telefónica tiene el otro 50%. Pero si la OPA no triunfa, el problema para Telefónica será recomponer las relaciones con los otros socios y los gestores de PT.

Posición de Espírito Santo

La toma de posición de Telefónica no ha sentado bien al Banco Espírito Santo (BES), el segundo accionista de referencia, que posee el 8,08% del capital. El BES considera que la toma de postura de Telefónica define claramente su oposición al "proyecto nacional" diseñado para la operadora portuguesa por la actual administración de la empresa.

"Queda claro si Telefónica está contra o a favor del proyecto nacional apoyado por el BES para PT", dijo una fuente oficial del banco liderado por Ricardo Salgado.

El BES, que es el accionista más reticente al éxito de la OPA de Sonae, subraya que "un proyecto que para ser viable pasa por el desmembramiento de PT y la venta de uno de sus principales activos estratégicos, la Vivo (operadora de móvil brasileña), a grupos extranjeros, no puede ser considerado un proyecto nacional".