Dos sindicatos policiales avisaron en 2005 que había corrupción en la comisaría de Ronda

Representantes de los sindicatos policiales UFP y SUP advirtieron a mediados de 2005 al inspector jefe responsable de la comisaría de Ronda (Málaga), detenido el pasado martes junto a otros seis agentes por "delitos comunes en el área de extranjería y explotación sexual de mujeres", de que "se enfrentaba a una plantilla con casos de corrupción". El alto mando policial, Juan Antonio Rodríguez, de 50 años, se entrevistó con los sindicalistas al hacerse cargo de la comisaría, a la que había llegado procedente de Sevilla con el mandato y la intención de "poner orden" ante las numerosas denuncias internas por irregularidades.

Según fuentes policiales, desde hacía "varios años" dos policías de escala básica que se encuentran detenidos controlaban los bajos fondos de la ciudad en la que "hacían y deshacían a su antojo". Está previsto que los imputados, excepto un agente que el martes quedó en libertad con cargos, declaren hoy por la mañana en el Juzgado número 3 de Ronda.

La unidad de asuntos internos de la policía llevaba varios meses investigando las supuestas corruptelas de los siete agentes y en las que participaba otra persona ajena al cuerpo. Los servicios jurídicos del sindicato Confederación Española de Policía (CEP) asumirán la defensa de cuatro imputados, mientras que los letrados del Sindicado Unificado de Policía (SUP), atenderán a los otros tres. Según fuentes policiales, "era de dominio público" que en la comisaría, en la que había apenas una treintena de agentes, se producían "demasiadas irregularidades".

Fuentes policiales aseguran que los arrestados traficaban con documentos y pasaportes y "hacían la vista gorda" con el menudeo de drogas en la zona de bares de Ronda "a cambio de favores".