Condenados a prisión dos hijos del fundador de Parmalat
El caso Parmalat, la mayor quiebra de Europa, ya tiene condenados: 17 personas, incluidos dos hijos del fundador de la principal empresa de productos lácteos italiana, pactaron ayer con la fiscalía sus penas de prisión. Estefano y Francesca, vástagos del fundador Callisto Tanzi, acordaron en la vista preliminar celebrada en el tribunal de Parma (norte de Italia) una condena de cuatro años y 10 meses y de tres años y cinco meses, respectivamente.
Según la ley italiana, con estas penas ambos se libran de pisar la cárcel por la quiebra que en diciembre de 2003 dejó un agujero de 14.000 millones de euros y 135.000 ahorradores estafados.
Un nuevo juez deberá dar el próximo 29 de marzo el visto bueno a las penas pactadas por 17 de los 62 imputados por quiebra fraudulenta, asociación para delinquir y fraude contable. Entre éstos están el ex director financiero, Alberto Ferraris, condenado a cuatro años, y el representante de Parmalat en Suramérica, Gianni Grisendi, que ha acordado una pena de tres años.
Rechazo de la fiscalía
No ha llegado a un acuerdo el antiguo director financiero, Fausto Tonna, que pasa por ser uno de los máximos responsables de la quiebra, ya que la fiscalía rechazó su oferta de cuatro años y seis meses de cárcel. Tonna ya había pactado dos años y seis meses en otro proceso que instruye un tribunal de Milán.
Además de los 62 imputados juzgados en Parma, el tribunal de Milán se ocupa de los delitos de especulación, obstáculo a la vigilancia del regulador bursátil y falsas comunicaciones.
El comienzo del juicio en Parma constituyó en junio de 2006 un éxito para la fiscal Emilia Romagna, que, con escasez de medios y personal, logró cerrar relativamente pronto un sumario de dos millones y medio de folios. El fundador de Parmalat, Callisto Tanzi, estaba entonces en arresto domiciliario.
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