Los partidos piden el voto joven en la consulta del Estatuto andaluz

Los partidos andaluces intensificaron en el cierre de la campaña los llamamientos a los jóvenes para que acudan mañana a votar en el referéndum del nuevo Estatuto de Autonomía para Andalucía. Pero, a la par, también rivalizaron sobre el esfuerzo hecho por cada una de las formaciones políticas para fomentar la participación, anticipando un previsible cruce de reproches en el caso de que la participación en la consulta no supere el 50%.

Los llamamientos a la participación se intensificaron ayer, aunque cada uno a su manera. El mensaje que ha traslado el Partido Popular durante toda la campaña ha sido la de mezclar la petición del voto afirmativo con el no a Manuel Chaves, contra el Estatuto catalán, a los nacionalismos insolidarios y hasta para el lehendakari, Juan José Ibarretxe.

Este discurso y el hecho de que durante dos años el PP ha estado criticando el Estatuto aprobado por el Parlamento andaluz por "romper España" ha creado confusión en el electorado de derechas, como días atrás reconoció el ex secretario general del PP andaluz y hombre de confianza de Javier Arenas, Juan Ojeda. El PP se sumó al consenso en la negociación final en el Congreso de los Diputados y en todos sus actos no ha dejado de recordar que la reforma no es necesaria ni se trata de una iniciativa política suya.

En el cierre de la campaña, el presidente regional del PP, Javier Arenas, tuvo como invitado al presidente del PP de Cataluña, Josep Piqué. Ambos enfatizaron que el Estatuto andaluz es "todo lo contrario" del de Cataluña, pese a que ambos contienen redacciones muy similares. Según Arenas, su partido es el que "más campaña" ha hecho por el sí.

Los socialistas, que han movilizado a todos sus cargos institucionales y del partido en estos 15 días -han celebrado 2.762 actos y dicen haber llegado directamente a 224.865 personas-, son los que más se juegan mañana, domingo. Su secretario general, Manuel Chaves, fue el impulsor de esta reforma en junio del año 2001 y la legislatura prácticamente ha girado en torno al proceso de reforma estatutaria, tapando la gestión del Gobierno autónomo.

Toda la campaña del presidente de la Junta de Andalucía ha estado dirigida a apelar al sentimiento y a resaltar los componentes simbólicos de la participación en el referéndum, toda vez que no hay un adversario con el que enfrentarse y, como dijo el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, un referéndum se asemeja más a un "partido amistoso". Chaves volvió a insistir ayer, como en las dos jornadas anteriores, en pedirle a los jóvenes -"a la generación de la libertad y de la autonomía"- que acudan a votar mañana.

El 21% (1,3 millones) del censo electoral tiene entre 18 y 30 años y convencerlos de que los contenidos del nuevo Estatuto les afectan ha sido su principal argumento de estos días. Además, el mensaje del líder socialista se ha centrado en destacar que si el Estatuto de 1981 sacó a Andalucía del subdesarrollo, el de 2007 será el que sitúe a la comunidad a la cabeza de las regiones europeas en 15 ó 20 años.

Chaves se ha esforzado en explicar que en esta ocasión no se trata de votar ni por un partido ni por un candidato, sino "por Andalucía", lo que para él es una "oportunidad histórica" y "un privilegio" que hay que aprovechar.

Las campañas de Izquierda Unida y del Partido Andalucista han sido más modestas, dado su escaso número de militantes. El coordinador federal de IU, Gaspar Llamazares, cerró campaña en Sevilla pidiendo el sí para un Estatuto que, a su juicio, es "referencia para el desarrollo federal del Estado". Esta organización aseguró que la mayor responsabilidad del no estará en el Partido Popular.

El Partido Andalucista, el único que pide el voto negativo en la consulta, aseguró que, sea cual sea el resultado de mañana, domingo, hará del no al Estatuto el eje central de su discurso en los próximos años.