Montilla pide que el acuerdo de competitividad aborde el impacto del cambio climático en las empresas

El cambio climático no sólo se circunscribe al medio ambiente. El protocolo de Kioto, por ejemplo, que limita las emisiones de CO2 a la atmósfera, repercute sobremanera en la actividad empresarial. Por ese motivo, el presidente de la Generalitat, José Montilla, aprovechó ayer el segundo aniversario de la firma del acuerdo de competitividad de la economía catalana para pedir a los agentes sociales que lo sellaron (CC OO, UGT, Fomento, Fepime y Pimec, además de tres departamentos del Gobierno catalán) que aborden el impacto del cambio climático en la economía productiva.

La Comisión Europea acaba de revolucionar al sector de la automoción con una propuesta para que los fabricantes europeos lancen al mercado coches que contaminen menos. ¿Afectará a la industria en Cataluña? La falta de nieve en el Pirineo, otro caso, ha hecho que las estaciones de esquí catalanas -y por extensión, el gremio de la restauración- den la temporada por perdida. ¿Cómo afectará la subida de las temperaturas al modelo turístico catalán?

El presidente catalán quiere que empiecen a debatirse desde hoy mismo los posibles ajustes y crisis que puedan derivarse del cambio climático en determinados sectores, según comunicó a patronos y sindicatos en la reunión de ayer del consejo de instituciones del acuerdo.

Mejora de la educación

El pacto celebró ayer dos años de aplicación con el compromiso de las partes de "darle un nuevo impulso", según suscribieron en una declaración conjunta. En el discurso de apertura de la reunión, el presidente catalán recordó que el acuerdo es "dinámico" y emplazó a "priorizar" y a "concretar aún más los puntos más relevantes" para proporcionar "respuestas eficaces y rigurosas a los retos económicos y a las demandas sociales".

Según fuentes de Presidencia, Montilla es más partidario de trabajar a fondo grandes temas monográficos que los análisis sectoriales, troceados. El cambio climático es uno de esos grandes bloques, como también lo es la mejora educación, una de las prioridades que se ha fijado el pacto.

El consejero de Economía, Antoni Castells, cuyo departamento coordina el acuerdo, destaca que la mejora de la competitividad pasa por una formación más ajustada, como fomentar el aprendizaje del inglés, la lucha contra el fracaso escolar y la promoción de la formación profesional. También estuvieron presentes los consejeros de Innovación, Josep Huguet, y de Trabajo, Mar Serna, así como los máximos mandatarios de sindicatos y patronales.

En los dos primeros años del acuerdo, el Gobierno catalán ha invertido 2.615 millones de euros y asegura que ha puesto en marcha las 86 medidas que incluye el documento, con un grado de cumplimiento del 85%.