El tripartito se niega a revisar el reparto de competencias

El Grupo Socialista fracasó ayer en su intento de que el Parlamento encargase al Gobierno la realización de un estudio en el que se evaluara y cuantificara la distribución de competencias entre el Ejecutivo y los tres territorios históricos. Su portavoz, Patxi López, quien asumió personalmente la defensa de esta moción fruto de una interpelación anterior al lehendakari, quería también que la Cámara constituyese una ponencia para revisar el funcionamiento del sistema y sus posibles disfunciones tras 25 años de su puesta en marcha.

Se trataba de "poner al día un entramado institucional" que, a decir de López, "resulta ya claramente obsoleto".

El líder socialista recordó que en el acuerdo de coalición del tripartito está enunciada la necesidad de ese debate sobre el modo de vertebración institucional y el compromiso de abordar la revisión del marco institucional y de las relaciones basadas en la Ley de Territorios Históricos.

Tanto desde las filas de Ezker Batua como desde las de Eusko Alkartasuna se volvió a admitir ayer esa necesidad. Sin embargo, ambos grupos se mantuvieron disciplinadamente al lado de sus socios peneuvistas para tumbar la propuesta socialista, que trataba, en palabras de López, de "compensar la inactividad de un Gobierno" que "no lidera las transformaciones que necesita el país". El secretario general del PSE se refirió a las "duplicidades, solapamientos y despilfarros" que se producen a causa del actual entramado institucional, que declaró "lleno de agujeros" y culpó de ello al Ejecutivo, bien "por desidia, por incapacidad o por falta de liderazgo".

Distribución "muy clara"

Sólo el PP apoyó la iniciativa socialista, aunque desde parámetros diferentes, como subrayó López, quien diferenció el planteamiento "foralista" de los populares del netamente "municipalista" de su partido. El popular Carmelo Barrio criticó el carácter "centralista, voraz y desmantelador de derechos" del Gobierno vasco y pidió políticas de reforzamiento de las diputaciones y de los ayuntamientos.

El PNV, a través de Joseba Egibar, defendió el actual modelo y recalcó que "el reparto de competencias está muy claro". Egibar coincidió con el portavoz de EB, Antton Karrera, en desviar la atención hacia las competencias estatutarias pendientes todavía de ser traspasadas, en un argumento que López no aceptó como justificación a la negativa a abordar la vertebración interna de la comunidad.

Desde las filas de Eusko Alkartasuna Juan Porres apuntó que una ponencia sería una pérdida de tiempo, mientras que la portavoz de EHAK, Nekane Erauskin, consideró que "no es momento para esta discusión".