Libertad con cargos para el detenido que mutiló el dragón del Parque Güell

El joven detenido por mutilar con una barra de hierro el dragón que preside la entrada principal del Parque Güell, en Barcelona, quedó ayer en libertad con cargos por un delito contra el patrimonio histórico. Según tipifica el código penal en su artículo 323, David P. C. podría ser castigado a una pena de prisión que oscila entre uno y tres años, correctivo que se aplica a los que "causen daños en un archivo, registro, museo, biblioteca, centro docente, gabinete científico, institución análoga o en bienes de valor histórico, artístico, científico, cultural o monumental, así como en yacimientos arqueológicos". El arrestado, de 22 años, nacionalidad española y vecino de L'Hospitalet de Llobregat, tiene una profusa lista de antecedentes por actos de vandalismo y acumula, además, varias denuncias por hurtos y daños en el mobiliario urbano, afirman fuentes policiales. Junto con David P. C. fue detenida una chica que pasó a disposición de la Fiscalía de Menores de Barcelona. El Ayuntamiento ya ha anunciado que se personará como acusación particular en el juicio contra los vándalos y los Mossos no descartan que se produzcan nuevas detenciones.

Las labores para restaurar el monumento de Gaudí comienzan hoy y las autoridades municipales confían en que el proceso no se alargue mucho. Fuentes del Consistorio prevén que el trabajo no será demasiado complejo porque los Mossos recuperaron parte del material del dragón arrancado a golpes. El primer paso consiste en evaluar los daños, que afectaron gravemente a la parte frontal y al lomo de la escultura.

El tiempo y las palomas

A pesar del malestar que ha causado en los vecinos del barrio este nuevo acto de gamberrismo contra uno de los emblemas gaudinianos, las autoridades municipales señalan que la principal causa del deterioro de los monumentos públicos no es el vandalismo, sino el simple paso del tiempo o los corrosivos excrementos de las palomas. Cada año, el Consistorio invierte cerca de un millón de euros en la restauración de los monumentos que la precisen. Sólo en un 10% de los casos, estos destrozos o desmejoras se deben a las salvajadas cometidas por vándalos.

De la restauración del popular dragón se ocupará la empresa constructora Sapic, firma a la que la gerencia municipal adjudicó el mantenimiento del Parque Güell para el periodo 2006-2007 con un contrato que asciende a 667.340 euros. La misma sociedad se encarga de la reparación y conservación de los monumentos de la capital catalana durante el mismo ejercicio por un monto de 1.629.323 euros, según consta en el acta de la comisión de Urbanismo, Infraestructuras y Vivienda levantada tras la sesión del pasado 5 de abril de 2006.

El acto de vandalismo ha reabierto el debate sobre la necesidad de reforzar la vigilancia nocturna en el Parque Güell, medida que exigen desde hace tiempo los vecinos del barrio.