En los carteles han puesto una foto

En los carteles han puesto una foto para el que la quiere mirar, Javier Arenas y olé, Diego Valderas y olá. /La gente dice "Viva el referéndum" al verlos pasar.

Y cada uno en la foto parece rezar con la boquita cerrá /

Desde la valla me pide Javier Arenas, que vote Sí a una Andalucía de primera. Dame tu voto mujer, que soy político andaluz y llevo al cuello la cruz de que no me votes tú/

Diego Valderas, corazón mío, tu capa roja sobre la urna yo votaré. Diego Valderas lleva corbata con un "te quiero" que entre suspiros te pide el Sí /

Torito bravo no mires a Álvarez de esa manera, deja que adorne también las vallas con su montera. Torito noble, ten compasión, que en los folletos pide Julián decir que No /

La copla de Quintero, León y Quiroga es lo único que le falta a las vallas que los tres partidos de la oposición utilizan para esta campaña del referéndum andaluz. No deja de ser un bochorno que PP, IU y PA estén aprovechando esta propaganda para promocionar a sus candidatos a la presidencia de la Junta. Y que lo estén haciendo con las generosas subvenciones que la administración regional ha puesto a disposición de los partidos para el referéndum del Estatuto el próximo 18 de febrero. En total más de 10 millones de euros, más del doble del presupuesto destinado por la Generalitat con motivo del referéndum del Estatut. La estrategia de los partidos de la oposición ha provocado una llamativa paradoja: los tres líderes que salen en los carteles o folletos para reclamar el sí o el no a la reforma del Estatuto, no han votado esta ley en el Parlamento andaluz. Los tres publicitados dirigentes que representan parlamentariamente al Estatuto son extraparlamentarios.

La periodista Lourdes Lucio se preguntaba el otro día en este periódico: "¿Es esto un uso fraudulento del dinero público?" A esa cuestión no respondió nadie, salvo Luis Pizarro, el secretario de Organización del PSOE-A, que se limitó a indicar que no le parecía correcto "que se utilice la campaña para la promoción personal". El PSOE es el único partido que ha huido de solapar el Estatuto con la imagen de su líder, consciente de que se juega más con el Estatuto que con su líder. Es justo lo contrario de lo que les ocurre a los partidos de la oposición, que están menos convencidos de sus líderes que de lo que ocurra en el referéndum. La otra pregunta que cabe hacerse tiene más fácil respuesta: ¿Hay campaña del referéndum del Estatuto o comienza ahora la campaña de las elecciones municipales e incluso de las autonómicas? A juzgar por los mensajes publicitarios de la mayoría de los partidos, las tres cosas.

A raíz de todo esto, se podría decir que éste es el primer referéndum de la historia que presenta candidatos. Hay candidatos al sí y candidatos al no. Curiosamente, son las mismas personas que serán luego candidatos a la presidencia de la Junta. El PA incluye una foto de Julián Álvarez en la carta que enviará a los electores en el buzoneo electoral con la papeleta del no, en la que también aparecerán los candidatos andalucistas en las ocho capitales de provincia. Hay, por lo tanto, en este referéndum candidatos a alcaldes que son candidatos al no, y actos de otros partidos donde se presentan a candidatos a alcaldes que son candidatos al sí. Todos estos actos de los partidos, todas esas cartas y todas esas vallas llenas de candidatos a la Junta y de candidatos a las respectivas alcaldías se van a pagar con los diez millones de euros destinados por la administración andaluza para promocionar la campaña del referéndum sobre el Estatuto.

El problema es tan viejo que ya cansa. El Parlamento andaluz constituyó hace diez años una comisión para abordar la financiación de los partidos políticos. Ni una sola vez en su ya larga existencia se ha reunido. Mucho menos para este referéndum, donde los partidos podrán financiar su campaña con unas subvenciones bien generosas: PSOE, 4 millones de euros; PP, 2,9 millones; IU, 1,5; y PA, 1,4. En la Cámara de Cuentas hay unos números que no los quiero mirar. Millones para propaganda y olé, millones para propaganda y olá.