Vizcaya se convierte en copropietaria del nuevo San Mamés con el Athletic y la BBK

Una sociedad patrimonial formada por la Diputación de Vizcaya, la BBK y el Athletic será la propietaria del nuevo estadio de San Mamés. La gestión se mantendrá en manos del club bilbaíno, en un modelo que el diputado general, José Luis Bilbao, equiparó ayer al del Museo Guggenheim. El Athletic deja así de ser el propietario único de su campo con el fin de garantizar la financiación de los 180 millones de euros en que se calcula el coste del proyecto, uno de los principales obstáculos al impulso de la obra. El Gobierno, al que Bilbao pidió su implicación, no figura por ahora en la sociedad.

La puesta en escena del acuerdo en la capital vizcaína, en el Palacio Foral, y el protagonismo del diputado general, quien acaparó las explicaciones a la prensa, evidencian el papel principal que la Diputación va a tener en la construcción del nuevo estadio, justo al lado del actual. José Luis Bilbao, quien es además socio del club, ha sido uno de los firmes defensores del nuevo campo y ha prometido desde el principio la aportación de ayudas forales.

Finalmente, la implicación pública será mayor con esta sociedad, a la que, según recalcó Bilbao, se aportan "participaciones y no subvenciones". La entrada de la institución foral y de la BBK en la entidad otorga un "compromiso de viabilidad del proyecto", señaló, antes de asegurar que esto "no es filfa".

Las consecuencias son inmediatas: el proyecto en el que trabajaba el Athletic tendrá que contar ahora con el visto bueno de sus dos socios y el club dejará de ser el dueño único de San Mamés. A cambio, el club solventa el gran obstáculo del proyecto, la financiación de los 180 millones de euros de coste que apuntan las primeras estimaciones. Hasta ahora, la entidad se había planteado sufragar la millonaria inversión echando mano de tres vías: sus propios fondos, la aportación de los nuevos socios y las ayudas públicas, una fórmula que fue vista con escepticismo.

Abierta a más socios

La sociedad se halla abierta a la entrada de más socios, como el Gobierno o el Ayuntamiento de la capital vizcaína. Bilbao, como ha hecho desde que se difundió el proyecto, volvió a pedir la implicación del Ejecutivo al tratarse de "un proyecto de ciudad, de territorio y de país". Precisó que su participación debería ser "con aportación de capital, no subvenciones".

Sin embargo, el Departamento de Cultura, del que depende este asunto, aseguró hace unos meses que no tiene intención de apoyar económicamente la construcción del nuevo estadio. En cuanto al Ayuntamiento, el diputado general afirmó que el alcalde, Iñaki Azkuna, conoce "el detalle" esta iniciativa y la "aplaude". Bilbao enfatizó que la construcción del campo no queda condicionada a la entrada de más socios. "Hoy nace de verdad el proyecto del nuevo San Mamés", proclamó.

La sociedad, para la que se apunta como nombre San Mamés Barria, arrancará con el "capital mínimo exigible" y aporta los terrenos del Athletic del actual estadio (casi 21.000 metros cuadrados) y la propiedad foral de la antigua Feria de Muestras, sobre la que se levantará la mayor parte de la instalación. Este modelo, dijo Bilbao, es similar al del Guggenheim, donde el Gobierno y la Diputación son los propietarios y la gestión corresponde a una fundación.

El diputado general aseguró que "en uno o dos meses" ya se tendrá "algo", en referencia a las primeras maquetas, y garantizó la transparencia en la contratación de las obras por concurso.

El acuerdo anunciado ayer despeja el plan urbanístico de regeneración del área de Basurto y San Mamés, donde también irá el nuevo campus tecnológico de la UPV. El Ayuntamiento ha instado desde hace más de medio año al Athletic a clarificar la operación, que no supone ninguna recalificación de terrenos y, por tanto, no aporta plusvalías. La Universidad ya ha firmado los convenios con la Diputación y el consistorio y espera iniciar sus obras en otoño, pero del club de fútbol no se tenían noticias.

La concejal de Urbanismo, Julia Madrazo, expresó en un comunicado su "agrado" por el cumplimiento de las fases para la ordenación de esta área y agregó que se "empieza a hacer realidad el plazo" que se marcaron.