Castro rechazó una técnica quirúrgica para elegir otra que acabó con complicaciones
El propio Fidel Castro y su entorno tomaron la decisión de someterse a la técnica quirúrgica que desembocó en una peritonitis que tiene postrado al dirigente cubano en situación grave, según fuentes médicas conocedoras del caso.
Afectado por una enfermedad intestinal, los médicos cubanos que le trataban se encontraban ante dos opciones: abrir un orificio en la parte baja del abdomen (un ano artificial) y extirpar la zona afectada, lo que permite una mejor cicatrización, o extirpar parte del intestino grueso y unir después directamente el intestino y el recto. Castro y su entorno, según fuentes médicas, rechazaron la primera opción. La intervención elegida finalmente salió mal, al romperse la cicatriz, lo que generó una nueva infección.
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