El Instituto Catalán de la Salud se convertirá en una empresa pública y podrá endeudarse

El Gobierno catalán aprobó ayer el anteproyecto de la ley que reformará el Instituto Catalán de la Salud (ICS), el organismo que gestiona ocho grandes hospitales y el 80% de los ambulatorios públicos. El propósito del Gobierno autónomo es convertir el ICS en empresa pública, algo que, entre otras cosas, le abrirá la posibilidad de endeudarse. Las centrales sindicales se mostraron muy críticas con esta reforma, ya que opinan que impedirá que se creen nuevas plazas de funcionarios, algo que desmintió la consejera de Salud, la socialista Marina Geli.

La futura ley abrirá la posibilidad de que, en un futuro, el Instituto Catalán de la Salud deje de convocar plazas de funcionarios; o lo que es lo mismo: que el futuro personal que se contratase no tenga asegurado el puesto de trabajo de por vida. El propio gerente del ICS, Francesc José María, reconoció ayer que el texto que ha presentado el Gobierno autónomo admite esta posibilidad. Eso sí, precisó que este propósito no forma parte de la agenda del tripartito y no se aplicará.

Los sindicatos, en cambio, mostraron ayer su inquietud ante el anteproyecto gubernamental. "Hay que modernizar el ICS, pero para ello no hace falta modificar la ley", indicó Luisa Montes, de Comisiones Obreras (CC OO). Rafael Miret, de UGT, expresó su temor ante el hecho de que el ICS deje de convocar oposiciones, ya que aseguró que este método "da seguridad al trabajador y al sistema". Miret añadió que, a día de hoy, el ICS "abusa de los contratos temporales, las sustituciones y los interinajes. ¿Qué pasará cuando entre en vigor la nueva ley?". Este temor también lo expresaron ayer las centrales sindicales corporativas. Desde Metges de Catalunya, Patricio Martínez aseguró que "el ICS se convertirá en una empresa pública gestionada como si fuera privada".

Tanto Geli como José María recordaron ayer que la Generalitat no tiene la intención de dejar de convocar oposiciones. "No se quieren cambiar las fórmulas de contratación", indicó José María.

El ICS es el heredero del antiguo Instituto Nacional de Previsión, y gestiona los centros sanitarios de titularidad autonómica que fueron transferidos hace dos décadas por la Administración central. Lo forman ocho grandes hospitales -entre ellos, Vall d'Hebron, Can Ruti y Bellvitge- y 450 ambulatorios.

Con la conversión del ICS en empresa pública, pasará a ser gestionado por un consejo de administración, con representantes de diferentes departamentos y de sus más de 40.000 trabajadores. El proyecto también dará más autonomía a cada centro y simplificará su organización interna.

La reforma del ICS se inició en la anterior legislatura, pero con la salida de ERC del Gobierno y el adelanto electoral, se quedó en el tintero. Geli lamentó ayer que la modernización de este órgano no la hubiera emprendido Convergència i Unió durante los 23 años que gobernó la Generalitat.

La consejera también avanzó que en las próximas semanas se aprobará el decreto que regulará las terapias naturales, una de las apuestas que también inició en la anterior legislatura pero que recibió fuertes críticas de algunos colegios profesionales. Geli también se refirió ayer a la mujer de 67 años que, tras someterse a una inseminación artificial en Estados Unidos, dio a luz a gemelos en el Hospital de Sant Pau de Barcelona hace dos semanas. La Generalitat descarta prohibir el acceso a los tratamientos de fertilidad tras la menopausia, aseguró Geli, y añadió que existe un acuerdo con los profesionales del sector para evitar estas prácticas en edades avanzadas.